Conforme pasan los minutos, los rumores sobre una prohibición de posiciones cortas por parte de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, a in stancias del Ministerior de Economía, son más intensos. "Anoche el Rey de España dijo que nuestro país vive una situación histórica excepcional. Los cortos pueden ser prohibidos, como ya pasó en otros momentos, por este mismo criterio", dice un operador madrileño. "No hay dinero y son los hedge funds junto con los programas con ordenador los que están provocando una verdadera masacre en la Bolsa española", añade un gestor de fondos londinense.
"La descapitalización de la Bolsa española en un abrir y cerrar de ojos no es por pánico, sino por inhibición de los operadores ante la insurrección de algunos catalanes, apoyados en las calles por otros europeos del mismo cariz", dice un banquero catalán. "Si las Autoridades económicas no actúan, lo que es un puro y grave movimiento especulativo, se convertirá más pronto que tarde en una gran tragedia económica, por encima de la propia insurgencia", señala.
"Y digo que es muy grave, porque comienzan los clientes de los bancos catalanes a ponerse muy nerviosos. A realizar trasvases de entidades catalanas a otras no catalanas. Igual o mayor inquietud se muestra en las multinacionales asentadas en Cataluña, que ven una caída de ventas de sus productos por el simple hecho de estar fabricados o elaborados en Cataluña", insiste.
"Mucho peor que las algaradas callejeras, que hoy van y mañana vienen, es la inseguridad jurídica y el crash de la Bolsa española. Sus efectos amplificadores son demoledores. Queramos o no, el mundo del dinero es el que manda, aquí y allá, en Oriente y en Occidente, en el Norte y en el Sur. En países demócratas o comunistas. El dinero es el dinero", sentencia