"La aseguradora Mapfre es el valor de la eterna promesa. Uno de los más y mejores recomendados desde hace años en el mercado, quizás porque capitaliza la presencia del sector asegurador en Bolsa (son dos compañías nada más las que cotizan) y, en el mismo acto, uno de los que más defrauda y no se ajusta a las expectativas creadas. Los datos conocidos la semana pasada volvieron a defraudar y, con ellos, las malas notas de los analistas. Mapfre registró un beneficio neto de 529 millones de euros en 2018, lo que supone un descenso del 24,5% respecto a 2017. A la caída del beneficio neto han contribuido el descenso de los ingresos financieros por los bajos tipos de interés, la depreciación de las monedas (impacto de 17 millones de euros en el resultado), el coste de los eventos catastróficos (impacto de 97 millones de euros) y la reexpresión por hiperinflación de sus filiales en Argentina, con un impacto negativo de 18 millones de euros", me dice el analista jefe de una gestora, que añade:
"Pero en el mismo ejercicio, el presidente de Mapfre, Antonio Huertas, percibió en 2018 una retribución total de 2,13 millones de euros, lo que supone un 3,55% más que en el ejercicio anterior, según ha informado la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En concreto, por ejercer de presidente de la aseguradora el pasado año, Huertas obtuvo 824.000 euros de sueldo (+1,48%), 660.000 euros de retribución variable a corto plazo (-1,2%), 576.000 de variable a largo plazo (igual que en 2017) y 71.000 euros por otros conceptos (frente a 2.000 euros el pasado año). Además, el pasado año la aportación a sistemas de ahorro de Huertas fue de 527.000 de euros..."
"Mapfre presentó hace tres años, en su junta general de accionistas, su plan estratégico para el periodo 2016-2018. El gran objetivo de este plan era obtener unos ingresos de 31.000 millones de euros en 2018, gracias a su apuesta internacional. Sin embargo, la facturación del grupo asegurador el año pasado fue de 26.590 millones de euros (menos incluso de lo que ingresaba en 2016)..."
"Mapfre no solo ha incumplido sus previsiones de ingresos. La entidad contaba con cerrar 2018 con un ratio combinado del 96% (una métrica para evaluar la eficiencia del negocio), pero la cifra final ha sido peor por las catástrofes naturales. También esperaba que la rentabilidad sobre activos propios (ROE, por sus siglas en inglés) terminara en el 11%, pero acabó el año pasado en el 6,4%. Además, preveía destinar entre el 50% y el 65% de sus beneficios a pagar a accionistas, pero el año pasado tuvo que emplear el 84% de las ganancias, por la caída del beneficio.