El deterioro económico de los últimos años ha tenido un impacto muy significativo en las tasas de crecimiento, márgenes operativos y capacidad de generación de caja en un grupo cuya inacción le ha llevado a estar muy sobredimensionada.
Entrada de Telefónica y cambios en el gobierno, clave
Telefónica adquirió un 3,2% de las acciones y la opción de llegar a un 6% en 2014. Además, prevemos que la SEPI, mayor accionista (20,1%), se implique más en Indra a través del Ministerio de Defensa. De momento ya han reestructurado la cúpula directiva nombrando a D. Fernado Abril-Martorell como máximo responsable. Consideramos que estos cambios son clave para que la compañía afronte la actual situación del mercado ajustando su tamaño e implementando una gestión más eficiente. La nueva directiva ya ha realizado provisiones >300 mln eur desde 4T14. Esperamos que los ajustes continúen en los próximos trimestres.
8 de Julio. Día del Inversor
Esperamos que anuncien un plan de reestructuración de amplia cobertura. Se baraja un plan de despidos >1.500 empleados (>6,9% plantilla en España y >3,8% total). Además, creemos que la directiva tendrá que seguir ajustando (a la baja) el valor de proyectos en cartera, mejorar la gestión del circulante y potenciar su generación de caja. En principio, confiamos en la reestructuración del grupo, un proceso que, no obstante, debería ser largo. En cualquier caso, consideramos que el mercado está siendo excesivamente optimista.
Valoramos Indra en 8,6 eur/acción
Valoramos Indra bajo DCF 2015/24e y aplicando una tasa de crecimiento del 1% a partir de entonces. Descontamos una recuperación del crecimiento de ingresos moderada y márgenes operativos (EBIT) que mejoran progresivamente hasta niveles del 7,5%. Descontamos los flujos a un WACC 7,3% (tasa libre riesgo 3,8%, beta 0,9 y prima mercado 5,5%)