Esta semana será muy activa en publicación de datos macro. De EEUU destacamos las referencias de empleo de mayo, con una expectativa de creación de puestos de trabajo levemente superior a la de abril. Además, se espera estabilidad en mayo de los ISM y que la confianza de los consumidores del mismo mes avance. El miércoles (cierre Europa) también se publicará el Libro Beige que servirá para preparar la reunión del 15 de junio en la que no esperamos subidas de tipos ante la proximidad del referéndum (Brexit). Sin embargo, un Libro Beige optimista sobre el crecimiento económico americano podría aumentar las probabilidades de subida de tipos en la reunión del 27 julio, actualmente situadas > 50%. Destacamos también la publicación de los PMIs finales de mayo en EEUU, Eurozona y China (oficiales y Caixin).
En China los datos deberían mostrar estabilidad, mientras que los datos finales de EEUU y Eurozona deberían confirmar la caída del dato preliminar. En la Eurozona, lo más relevante será la reunión del BCE, que se prevé que mantenga los tipos y los programas de estímulo sin cambios, pero donde la atención estará en sus previsiones de crecimiento e inflación (Ver Mercados). Además, estaremos pendientes de las expectativas del IPC de mayo en Europa, que se espera que se mantengan en terreno negativo o nulo (según países) en términos interanuales. Por último, destacamos que la OCDE anunciará sus previsiones de crecimiento.
De cara a esta semana (EEUU y Reino Unido cerrados el lunes por Día de los Veteranos), la atención del mercado estará en las reuniones del BCE y la OPEP (jueves) y en el plano macro, con numerosas referencias. Las más relevantes serán los datos de empleo de mayo en EEUU, de los que se espera una leve mejora en el ritmo de creación de empleo frente a abril, ISM manufacturero de EEUU y PMIs en China, con expectativas de estabilidad.
En Europa lo más relevante será la reunión del BCE (jueves 2). No se esperan novedades en materia de nuevos estímulos monetarios, con la atención puesta en la implementación de las medidas aprobadas el 10 de marzo (TLTROs y QE corporativo a partir de finales de junio). Estaremos pendientes también de los comentarios sobre Grecia, que podría abandonar próximamente el ELA (línea de liquidez urgente y más cara del BCE) para pasar a financiarse como el resto de bancos centrales europeos (poniendo su deuda pública como colateral). A medio plazo, la deuda helena también podría ser objeto de compra dentro del QE. A su vez, el BCE anunciará sus previsiones de crecimiento e inflación para 2016-18.
Estaremos especialmente pendientes de las previsiones de inflación, tras la importante subida del precio del crudo desde los mínimos de enero (+84%). En caso de revisarse al alza las expectativas de inflación, el mercado podría interpretar que no habría QE adicional más allá de marzo de 2017. medidas para congelar la producción, habiendo pasado el riesgo a que se produzca un aumento de la producción (Arabia Saudí e Irán interesadas en aumentarla para satisfacer la demanda interna y compensar el reciente descenso de producción en Venezuela, Nigeria y Canadá). En caso de confirmarse estas expectativas, podríamos ver cierta consolidación en el precio del crudo.