Apertura plana en las plazas europeas, con múltiples referencias de interés a lo largo de la sesión, entre las que destacamos las reuniones del BCE (decisión 13:45h, rueda de prensa 14:30h) y de la OPEP, la subasta de deuda del Tesoro español (bonos a 5 años y obligaciones a 10 y 30 años, con el objetivo de captar 4.000 - 5.000 mln eur) y datos de mercado laboral en Estados Unidos, que se mantendrá fuerte (encuesta de empleo privado ADP de abril 173.000e vs 156.000 anterior). De hecho, el Libro Beige conocido ayer apunta a un crecimiento moderado de la economía americana, destacando un sólido mercado laboral y un ligero repunte de la inflación. Por su parte, los indicadores más adelantados del sector manufacturero ofrecen lecturas mixtas: debilidad en el PMI pero con un ISM que supera las expectativas. En este contexto, las probabilidades de subidas de tipos se mantienen en 22% (15-junio) y 53% (27-julio). Destacamos también la caída en Japón (Nikkei -2,3%) al aplazarse el anuncio de un nuevo paquete fiscal que el mercado esperaba a corto plazo.
En la reunión del BCE no se esperan novedades en materia de nuevos estímulos monetarios. La atención estará puesta en la implementación de las medidas aprobadas el 10 de marzo (TLTROs y QE corporativo a partir este mes de junio) y en los comentarios sobre Grecia, que podría abandonar próximamente el ELA (línea de liquidez urgente y más cara del BCE) para pasar a financiarse como el resto de bancos centrales europeos (poniendo su deuda pública como colateral). El BCE anunciará también sus previsiones de crecimiento e inflación para 2016-18. Estaremos especialmente pendientes de las previsiones de inflación, tras la importante subida del precio del crudo desde los mínimos de enero (>+80%). En caso de revisarse al alza las expectativas de inflación, el mercado podría interpretar que no habría QE adicional más allá de marzo de 2017.
Por otro lado, la OPEP celebrará una reunión en Viena en la que no se espera que se adopten medidas para congelar la producción, en la medida en que Irán no está dispuesta a hacerlo hasta que recupere los niveles previos a la imposición de sanciones, algo que previsiblemente no ocurrirá hasta 2S16. De hecho, el riesgo parece estar inclinándose del lado de un incremento de la producción, por lo que podríamos ver cierta consolidación en el precio del crudo tras los importantes avances registrados desde mínimos.
Por su parte, la OCDE presentó ayer sus previsiones semestrales, apuntando a un débil crecimiento a nivel mundial y pidiendo medidas a los gobiernos para impulsarlo, en la medida en que las políticas monetarias expansivas tienen ya un limitado recorrido. Revisa a la baja en 3 décimas el PIB global 2016e hasta +1,8% y en dos décimas 2017e hasta +2,1%, fundamentalmente por EEUU (+1,8%e en 2016, -2 décimas, y +2,2% estable en 2017e) y Japón (-1 décima en 2016 hasta +0,7% y -2 décimas en 2017 hasta +0,4%). Por el contrario, revisa al alza la Eurozona 2016 hasta +1,6% (+3 décimas tras un 1T más fuerte de lo esperado) y mantiene 2017 en +1,7%. También revisa al alza la previsión para España en 1 décima hasta +2,8% en 2016, pero a la baja en 2 décimas 2017 hasta +2,3% al no persistir ciertos impactos positivos como los bajos precios del crudo y otras materias primas y la política fiscal. Como principal factor de riesgo a corto plazo, citó el Brexit. Entre los riesgos de largo plazo, destacó los tipos de interés bajos o negativos, que lastran los beneficios del sector financiero, que podría verse obligado a elevar el coste del crédito. La OCDE considera que los gobiernos deberían aprovechar los bajos tipos de interés para financiar inversiones, lo que junto a las necesarias reformas estructurales, podría impulsar un mayor crecimiento a medio plazo.
En el plano empresarial, recordamos que Amadeus (incluida en nuestra cartera versátil) celebra hoy su Día del Inversor.