El crecimiento de la economía de EE.UU. no está batiendo expectativas. En la primera mitad del año se espera un crecimiento del PIB cercano al 1%, que es la más baja desde 2012. Para la segunda mitad no se esperan tasas mucho mayores. La debilidad de la recuperación es sorprendente dada la teoría económica convencional. En 2009 la recesión fue la peor en décadas, así que el crecimiento de 2009 debería haber sido de la magnitud, sin embargo no lo ha sido. Estos son los datos del crecimiento real anual del PIB tras periodos recesivos:
- Entre 1982-1989 crecimientos del PIB del 4,5% anual.
- Entre 1991-1998 crecimiento del 4,2% anual.
- Entre 2001-2007 crecimiento del 2,8% anual.
- Entre 2009-2016 crecimiento del 2,1% anual.
¿Pero cuáles pueden ser los motivos de esta falta de crecimiento? El analista Timothy B. Lee expone algunas teorías:
1. Teoría de la falta de innovación: En el siglo 20 la adopción y desarrollo de una tonelada de importantes innovaciones: automóviles, aviones, aires acondicionados, antibióticos, refrigeradores, televisión, PCs, teléfonos celulares. A excepción de los teléfonos inteligentes, es difícil ver una nueva y gran tecnología a partir del 2000.
2. Teoría de escasez de gastos: La teoría es simple, si el gobierno da más dinero a la gente, ellas lo gastarán. Más gasto significa mayor creación de empleo y mayores ingresos.
El problema reside que a un nivel de expansión monetaria el efecto en el incremento del gasto, y de la cadena de creación de valor desaparece casi por completo. Las políticas monetarias de los principales bancos del mundo han sido ultra expansivas en los últimos años. Ya no hay margen de mejora.
3. Mala gestión corporativa: Otra posibilidad es que aunque hay multitud de oportunidades de inversión, la presión de los mercados financieros disuade a los equipos directivos para aprovecharlas. Los grandes accionistas de las compañías prefieren que se incremente el pago de dividendos que las compañías inviertan en nuevas líneas de negocio lo que reduce la capacidad de crecimiento.
4. La economía está presionada a la baja por la deuda: Uno de los principales factores detrás de la crisis financiera de 2008 fue el alto nivel de deuda acumulada tanto por individuos como por empresas. Cuando los precios de los activos comenzaron a caer, los particulares y las empresas entraron en una situación de “underwater”, llevando a las suspensiones de pagos y al pánico vendedor.
Los efectos posteriores a esa situación fueron que tanto las familias como las empresas necesitaron un largo periodo de tiempo de desapalancamiento, focalizándose en pagar sus deudas antes de en comprar nuevos bienes y servicios.
5. Excesiva regulación: Es probablemente la teoría más popular. El exceso de regulación ha reducido la tasa de crecimiento. Es más una crítica política que económica.
6. La economía está siendo dominada por grandes e influyentes compañías: El periodo desde 2010 ha sido malo para los trabajadores comunes, pero bueno para las compañías. En los últimos seis años, los beneficios corporativos han alcanzado los niveles más altos desde 1960.
La falta de regulación ha provocado que grandes compañías hayan alcanzado una elevada cuota de mercado, tiendo poder de fijación de precios y sacando del mercado a compañías más pequeñas.
Este factor, junto con la tendencia a la concentración empresarial, ha provocado que las empresas no necesiten innovar tanto, y en los efectos negativos que esto conlleva.
7. El incremento de la edad de la población: Esta teoría se basa en aspectos demográficos. Los ciudadanos de los países occidentales cada vez son más mayores. La edad promedio de la población tiende a subir en estas economías. La gente joven tiende a comprar más nuevas ideas, tomar riesgo y comenzar nuevos negocios. El incremento de la edad resta dinamismo a una economía.