Hay quienes piensan que la tierra es plana. El trader novato se ha empecinado en buscar la piedra filosofal, es decir, la estrategia efectiva. En mi caso particular no le doy la espalda a una estrategia que haya arrojado una serie de perdidas, por lo contrario, me esfuerzo por entender la razón de ser del resultado. Encontramos numerosas herramientas que prometen alcanzar el éxito sin luchar, sin fracasar, sin problemas; soluciones facilistas que seducen a un gran número de individuos, cuyos capitales se evaporan y de paso sus ilusiones.

El dolor es útil porque indica que sé está aprendiendo una lección, mientras más lastime el momento más importante es la enseñanza. La mayoría huyen al sentir incomodidad, no guerrean, desconocen que el trading es de momentos y que no todos son paradisiacos. Abandonar un proceso para encaminarse en uno nuevo con la esperanza de no tener trabas, es una idea muy tierna, muy poética, muy fantasiosa. La mala noticia es que al hacer trading estamos destinados a vivir una aventura con severos desafíos, siendo el más complejo la lucha mental que libramos al decidir. Un proceso mal llevado es peor que perder por causa de un stop loss, incluso creo que esto último no es un mal, es una necesidad, el quebrar un proceso es como beber veneno, y pretender tener una excelente salud. Las estrategias jamás nos darán resultados sin primero haber superado los retos que plantean; acepte y conviva con los defectos, conozca el desafío, las grandes conquistas demandan grandes esfuerzos, todas las estrategias lastiman, elija en donde sufrir; quizás pensará que soy pesimista. Pasé años editando las reglas de mis estrategias creyendo fervientemente que las fortalecería, era la actitud que adoptaba tras una hilera de pérdidas. Al final de cuentas editaba tanto las reglas que terminaba con estrategias totalmente diferentes, me retaban pero nuevamente elegía la misma actitud: Cambiar las reglas. El fracaso brotaba como hierba mala, hasta que aprendí a perder sanamente, el tiempo me ha enseñado que hay momentos para luchar y otros para dejarse llevar.

El trader es el fracaso del fracaso de la estrategia, porque no se adapta al mal momento. No esté asustado, esté preparado mentalmente y tácticamente, empiece por aceptar la asimetría de la estrategia. El planeta no es plano, es redondo. Jamás va a encontrar la estrategia perfecta, mejor capte la perfección en la imperfección de la estrategia. No se permita cometer el mismo error, significa que no está aprendiendo la lección. Evite empoderar el problema, ocurre cuando no se prevé, no se previene o cuando al preverlo no sé actúa. No toda pérdida es ocasionada por un error, hay derrotas necesarias, obligatorias, para identificarlas es sencillo: Son aquellas que nos liberan, y nos permiten seguir fervientemente nuestro plan de trading.

La actitud 

Es más relevante una actitud correcta que una buena estrategia.

He visto excelentes estrategias convertidas en caos, en manos de traders inexpertos. ¿Cómo poseer una correcta actitud? Inicie con esta pregunta: ¿Las perdidas qué he obtenido son sanas o malignas?; Pierde sentido adoptar una actitud positiva sin un respaldo táctico, es semejante a ir al médico y que aconseje: - tenga una buena actitud - ; sin hacer nada más, sin un examen, sin un diagnóstico, con un desinterés por escuchar nuestro malestar; no tiene sentido, al igual que mantener entre tropiezo y caída, sin examinar la razón. La actitud gana poder al ser respaldada por una implacable gestión del capital y de la estrategia. Los pensamientos que florecen ante un mal momento, establece nuestra manera de actuar, nuestros actos le dan forma a los resultados. La disciplina juega un rol protagónico a la hora de adoptar una sana actitud, sencillamente haga lo que debe de hacer, sin excusas, sin cambiar lo estipulado en su plan por temor a perder. Pero para que sea sencillo, practique, practique y practique. ¿Saldrá a los -200 puntos?, hágalo, y divórciese de la idea que reconocer una perdida es perjudicial. Lo maligno es esa actitud patética de creer que el trading está lleno de unicornios, de arcoíris, que el mejor trader es el que poco falla, que todo irá bien. Será lo contrario: Problemas, malas decisiones, reglas sin cumplir, miedo a seguir, duda, un panorama incierto.

Aprenda a catalogar sus pérdidas en buenas y malas; poco sirve tener una actitud positiva mientras recolecta pérdidas malignas, esfuércese por tener pérdidas buenas, es decir, aquellas que brotan al respetar las reglas de la estrategia, de ese modo tener una actitud positiva tiene más sentido, porque la perdida no ha sido originada por la improvisación, sí por la estrategia, se supone que a esta altura de la historia debemos de tener un claro diagnostico táctico, por ende poseemos la capacidad de prever la situación adversa y estar preparados. Nuestra actitud emite una frecuencia electromagnética, la ciencia lo ha demostrado, entonces, no es un tema meramente filosófico, o una cábala.

El éxito de la estrategia no es cuestión de azar, sí de actitud, sí de las decisiones tomadas y no tomadas, sí de la mentalidad. Luchar contra nosotros mismos es la batalla más importante. El trader más poderoso es aquel que tiene el poder sobre si mismo. Es hora de usar pantalones largos, es momento de dejar de actuar con triquiñuelas. Jamás encontrará la estrategia perfecta, imbatible. Enfóquese en aprender a fracasar correctamente, para lograrlo practique siempre con la misma estrategia, conozca su debilidad táctica, no la fusile ante una mala racha, entienda de una vez por todas que es un suceso natural. Gestione su capital coherentemente, conozca los pros y contras del apalancamiento usado. Repase las estrategias, identifique su estilo de trading. Acepte sus propios errores y corríjase cuando esté a punto de tomar una decisión nefasta. Lleve un diario de sus jornadas de trading, siéntese a final de la semana o mes, a descifrar cual es el error más común, vea a los ojos sus defectos tácticos, no los pase por alto, de lo contrario a futuro, su actitud ante un mal momento será trivial. Antes de abandonar una estrategia piense: ¿A qué se debe mi cobardía?

La actitud correcta se caracteriza por aceptar que pasará por momentos dulces y amargos, una realidad que no va a cambiar porque el mero hecho de aventurarse a realizar trading, involucra riesgos, es inevitable. La actitud correcta distingue y convive armónicamente con la debilidad de la estrategia. Inspírese en los malos momentos para estudiar aún más, para corregir su actitud, y ser un(a) mejor trader día a día.