Miguel Ángel C., analista y fino observador, me llama para dialogar sobre el auge de las SOCIMIS. Después de una hora larga de conversación, sentencia: "es puro eufemismo, los mismos perros con diferentes collares. Es la cultura eterna del ladrillazo en España. Queda más fino hablar de SOCIMIS que de inmobiliarias, porque los bolsistas e inversores tienen pésimos recuerdos del auge y caída al infierno de las inmobiliarias en la Bolsa española antes de la llegada de la Gran Crisis. Hasta el punto que el Ibex estaba en manos de ellas. Aviso a navegantes". Y ahora, lo que dice el protocolo. Las SOCIMIS son entidades que cotizan en los mercados de valores, y cuyo objeto social es la adquisición, rehabilitación y promoción de inmuebles para su alquiler, han conseguido tal éxito que se han convertido en las impulsoras del mercado. Aunque en 2016 estas sociedades redujeron su inversión, el ejercicio pasado ha marcado un nuevo récord. Entre las cuatro grandes, Merlin, Hispania, Axiare y Lar España, sumaron operaciones por un valor de 13.790 millones de euros, un 8% más que en 2015, según la consultora CBRE. A semejanza de los Real Estate Investment (los Reits anglosajones), las socimis son vehículos de inversión para canalizar el ahorro, tanto de particulares como de inversores institucionales, hacia diferentes tipos de inmuebles. Y a partir de ahí, muchas definiciones más. O lo que es lo mismo,el ladrillo no ha muerto ¡Viva el ladrillo!

Sobre la burbuja inmobiliaria se ha escrito hasta la extenuación. Sobre la caída libre de los precios de las viviendas, lo mismo. También, sobre el enquistamiento del problema. Algunos sabios, ahora desplumados, han llegado a decir que los precios inmobiliarios de antaño no volverían. Y claro que no volverán, porque a este ritmo serán mucho más altos dentro de poco. La aversión al riesgo, con unos mercados financieros totalmente alocados y sin ofrecer rentabilidades positivas. El sentimiento de que el dinero físico desaparecerá más pronto que tarde y la creencia, en fin, de que el ladrillo siempre ha sido una buena inversión han provocado un giro radical en las expectativas: nacen grandes inmobiliarias y, con ello (también sin ello) el sector mueve ingentes cantidades de dinero en el mundo”, me dice un experto inversor, que recuerda:

Es la nueva encuesta de hogares que publica el INE, referida a 2016. Miren este gráfico…El 77,5 % de los hogares tenía el año pasado una vivienda en propiedad, tanto con pagos pendientes como sin ellos.

Los hogares que vivían en alquiler se redujeron ligeramente el año pasado, situándose en el 17,3 % del total desde el 17,5 % de 2015.

El 77,5 % de los hogares tenía el año pasado una vivienda en propiedad, tanto con pagos pendientes como sin ellos.
Los hogares que vivían en alquiler se redujeron ligeramente el año pasado, situándose en el 17,3 % del total desde el 17,5 % de 2015.

En los hogares con todos los miembros de nacionalidad española el porcentaje de hogares en vivienda en propiedad con pagos pendientes se incrementó del 29,9 % hasta el 30,1 %.

Al final, estos números son claros al mostrar la importancia que tiene la vivienda en propiedad para los hogares españoles.

Y el hecho de tener un sistema hipotecario tan eficiente y atractivo en precio como el español sin duda es el mejor servicio que proporcionan los bancos a los hogares.