"Paciencia, como la del Santo Job. Esa es la clave de ayer, de hoy y de mañana. "¿Ganar dinero? ¿Dónde? ¿Cómo? ¿Cuánto? No, olvidemos estas preguntas. La clave para los próximos meses es NO PERDER DINERO. Volverán, de manera recurrente, el miedo y el pánico, la euforia y la borrachera. Nadie estamos a salvo, nadie estamos inmunizados ante el resurgir de la volatilidad, que volverá a llegar más pronto que tarde. Los bancos centrales siguen llevando la manija para que los Estados, las familias y los individuos sigan con el desapalancamiento, eliminando las grasas del exceso de deudas contraídas. Las empresas refinancian créditos, pero sólo las más grandes lo hacen a tipos competitivo. Una época de Represión Financiera como la actual no tiene precedentes en la Historia reciente. Los Estados volverán a poner más impuestos a las transacciones bancarias, además de las tasas que ya te cobran los bancos. Volverán a poner impuestos a los movimientos de capital (cheques, transferencias, internet...) y marcarán con hierro candente cualquier actuación en Bolsa siempre que ésta redunde en beneficio del inversor, ahorrador o especulador. Si hay pérdidas, que las asuma el que invierte, ahorra o especula. Nadie estamos inmunizados ante una Represión tan brutal. Y menos los que tienen dinero...", me dice uno de mis gurús favoritos.
Interesante artículo enlacartadelabolsade Germán Fermo, en esta línea: El 2013 ha encontrado a más de uno con la guardia muy baja en especial para un asset class que desde el 2008 le ha dado muchas alegrías al inversor: bonos de todo tipo, moneda y color. De hecho todos los bonos en general han sido severamente castigados como reacción obvia a la elocuente, rápida y sorpresiva subida de yields que ha afectado a los mercados desde mayo de este año. Ante este movimiento que ha puesto a ciertas curvas de emergentes en más del 20% negativo, surge la tentación de volver a armar posiciones de más abajo para muchos bonos que han quedado debajo de la par, fenómeno que no se veía desde hace mucho tiempo.
Sin embargo, ponerle el pecho a un tren que viene de frente en general termina siendo una mala decisión. Y en este sentido la dinámica que ofrece la 10yr por los próximos meses/años bien se asemeja a la de un tren que viene despacio, gradualmente pero sin dudas muy de frente. Como comentamos en repetidas ocasiones, el mercado parecería haberse encaminado a un nuevo mini-paradigma dentro del ciclo de laxedad monetaria que ha caracterizado a la crisis desde su inicio.
Si bien, las tasas seguirán bajas por mucho tiempo más, parecería consolidarse un escenario de suba gradual y sostenida de yields a nivel global lo cual es una muy mala noticia para posiciones compradas en bonos con duration larga y tasa fija. Lo que quiero insinuar con esto es que la tentación existe de llevarse por ejemplo un bono que te rinde ahora un cacho más que antes (¿5%?) pero al hacerlo uno queda expuesto a duration y si la suba de yields en USA se mantiene, lo que uno perdería por la valuación a mercado del bono podría ser claramente superior a todo el carry de un año. Quizá convenga más esperar y salir a conseguir carries y yields más altas.
O sea, el mercado parecería plantearle al tenedor de bonos dos alternativas: a) ¿rearmamos posiciones a carries más altos con bonos que ahora están bajo la par?, b) si las yields suben, estos bonos probablemente sigan cayendo en precio. En un mes ante una mayor suba de tasas uno puede perder el carry de tres años tal como ha sido el caso en muchas posiciones de bonos durante estos últimos dos meses. En este sentido quizá hasta conocer el punto de estabilización del mercado quizá convenga aplicar un proverbio criollo muy conocido: “soldado que huye sirve para otra guerra”.
No siempre se hace necesario estar invertido agresivamente y más aún en presencia de un potencial cambio de paradigma que sin ser abrupto puede generar sustanciales pérdidas en el marked-to-market tal como ya lo ha hecho en estos últimos dos meses. Quizá en el contexto actual una posición de corta duration en activos denominados en Dólares a uno podría darle la chance de jugar la suba de yields vía fortalecimiento del Dólar y evitar un largo proceso de baja de precios en bonos hasta que el mercado se ubique en lo que parece ser un claro nuevo equilibrio de yields más altas y de un proceso de suba gradual de tasas que lejos está de haber culminada.
Esperar al nuevo equilibrio con una duration corta y con exposición Dólar Americano parecería ser una forma razonable de seguir esquivando a un tren al que Bernanke lentamente le está soltando la mano, nada trágico pero un claro cambio de tendencia y por lo tanto la obligación de replantearse posiciones que han sido altamente rentables en este lustro y que se están quedando fuera de moda.