No solo se trata de implementar la unión monetaria como también hacerla sostenible en el tiempo.

La supervisión y resolución única de los bancos, conjuntamente con la garantía común de depósitos, sin duda son imprescindibles. Pero también lo son a medio plazo tanto una mayor convergencia fiscal, con una mayor mutualización de riesgo en la zona. Además de la libre circulación laboral y de capital. Sin olvidarnos de la convergencia de los ciclos económicos entre países.

¿Solo de los ciclos económicos? La creación del Euro dio por supuesto que la convergencia monetaria llevaría a una convergencia real. Las deficiencias en el diseño del Euro se reflejaron con la crisis. El resto ya lo saben.

En 2010 el Consejo Europeo fijó la estrategia para 2020, enfocada en cinco grandes objetivos: empleo, inversión y desarrollo, cambio climático, educación y reducción de la pobreza. Objetivos que deberían ser alcanzados en 10 años. En estos momentos quedan 3 años para conseguirlos.

Eurostat hace un seguimiento periódico de hasta nueve indicadores de los objetivos finales. El último lo ha publicado hace unos días. En este gráfico de radar se observan los progresos obtenidos hasta el momento en estos indicadores…

Pobreza, inversión y empleo son los que peores progresos han mostrado hasta el momento. En algunos casos con un enorme gap con respecto al objetivo, como sería luchar contra la exclusión social. Ahorro energético, educación y la concienciación sobre el cambio climático han desarrollado un mejor comportamiento.

La cuantificación del nivel y objetivos se puede observar en el siguiente cuadro…

Hay mucho trabajo por hacer. Reformas estructurales que permitan un aumento del crecimiento potencial. Y todo ello encuadrado en un modelo de crecimiento inclusivo. Parte de este modelo pasa por la mayor inclusión financiera. Los bancos españoles son un buen ejemplo del buen hacer en este sentido. La tecnología, el avance en la digitalización de los servicios financieros, sin duda va a ser clave para seguir avanzando con transparencia y responsabilidad en la inclusión financiera que facilite una mayor inclusión social.