El pasado miércoles el Dow Jones superó por primera vez en su historia los 22.000 puntos. Los medios financieros estadounidenses y otros de alrededor del globo, publicaban en primera página este hito.
Los analistas financieros de todo el mundo fijaban ya el siguiente objetivo alcista y se felicitaban por el buen comportamiento del mercado de valores americano, que impulsará la confianza del inversor, por tanto la consumidora, y por tanto la economía del país y del mundo. Bueno, no todos eran tan optimistas. El columnista de MarketWatch, Rex Nutting, cree que esta noticia no es buena para la mayoría de nosotros. Veamos cuales son los argumentos que da para ello:
Que los precios de las acciones alcancen niveles récord no es inherentemente bueno. Es bueno para los individuos que poseen las acciones, pero la mayoría de la gente ni posee muchas acciones, ni se beneficia de los precios tan altos. Los medios no aplauden cuando la leche sube, ¿por qué la subida en el mercado de valores debería ser diferente?
Hagámonos esta pregunta, ¿quién posee el mercado de valores?
Casi la mitad de las acciones son poseídas por el 1% de la población más rica. Otro 41% es poseído por el 10% de la población más rica, por lo tanto, el 90% de la población restante sólo posee el 9% de las acciones emitidas.
En la última encuesta de Consumer Finances se mostró que sólo el 48,8% de las familias poseía acciones directa o indirectamente. Para el 50% de las familias con menos ingresos, sólo un cuarto tenían alguna acción. La típica familia de clase media tenía acciones en promedio valoradas en menos de 10.000 dólares.
Los altos precios de las acciones son buenos para la gente que está vendiendo, pero no para la gente que está comprando. Si tú intentas ahorrar para tu retiro, los altos precios de las acciones son terribles.
Los altos precios de las acciones son particularmente malos para la gente joven. Yo compré mi primera acción en la década de los 70, así que me beneficié de las increíbles ganancias posteriores. Mis hijos están comprando acciones ahora, a los niveles altos actuales.
Con las acciones en máximos históricos, y con los ratios PERs disparados, no queda mucho potencial alcista. Los retornos de las próximas décadas no es probable que alcancen el retorno del 11% anual que yo he recibido desde 1977.
Los altos precios de las acciones podrían ser beneficiosos si significara más capital invertido en las empresas. Pero esto es un mito. En realidad, el mercado de acciones es un proceso para extraer riqueza de las empresas y traspasarla a la gente rica que posee las acciones. Así que ahórrese las celebraciones. El hito de Wall Street es una gran noticia para los ricos. Para nosotros, no es una gran noticia.