En estas páginas llevamos hablando desde hace años del cada vez más extendido proceso de automatización laboral que está provocando que un gran número de empleos, hasta ahora ejecutados por humanos, pasen a manos de robots. Esta automatización se está dando con especial fortaleza en el sector financiero. Hace una década, cuando empezó a vislumbrarse la posibilidad de que los procesos productivos automatizados se extendieran a otros ámbitos laborales, pocas personas creían que llegaría con este ímpetu al mundo de las finanzas, y sin embargo, aquí está. Veamos algunas opiniones y datos al respecto:

Según Vikram Pandit, quién lideró Citigroup Inc. durante la crisis financiera, los avances tecnológicos podrían hacer que el 30% de los empleos bancarios desaparezcan en los próximos cinco años. David Siegel, co-fundador del fondo de cobertura cuántico Two Sigma, ha mostrado su preocupación sobre que pronto los avances tecnológicos harán de la fuerza laboral humana algo obsoleto.

Goldman Sachs ha declarado que está en medio de un proceso amplio de automatización que ocupará campos que dominaban ante personal humano. JP Morgan se ha pronunciado en el mismo sentido.

¿Debería empezar a preocuparme si trabajo en la industria financiera? La respuesta es que sí. Según las estimaciones que se han realizado (gráfico adjunto), de aquí a 2025 se perderán 4.000 empleos en la banca de inversión estadounidense, lo que se puede extrapolar a la banca europea. Se destruirán 15.000 empleos en las operaciones de trading, y 90.000, o el 30% de la fuerza laboral), en personal dedicado actualmente a la gestión de activos. El total de pérdidas en la industria será de 230.000, que supone el 18% del total.

En el siguiente gráfico se recoge la probabilidad de que los diferentes puestos de trabajo de este sector sean automatizados. En el caso de analista financiero es del 25%, así que hay una probabilidad entre cuatro que dentro de unos años este artículo lo haya escrito un robot. Habrá que prepararse entonces.