"Con frecuencia, los mercados sufren episodios de trastornos bipolares, que causan estragos en las mentes y en los bolsillos de muchos actores en los mercados. En el pasado hemos visto episodios de euforia, que se alternan con momentos de pánico, afectados por la propaganda de medios de comunicación y cartas (o notas) diarias de los gestores a sus clientes. La intrusión de grandes monstruos depredadores, muchos de ellos jugando a la baja (posiciones cortas), es decir, apostando por la caída de un valor, no tendría mayor importancia técnica si el patrimonio que administran no fuera tan abultado, muchos puntos de PIB en economías como la español y, en el mismo acto, si sus dirigentes máximos no estuvieran vinculados, con anteriores, a supraorganismos como la Reserva Federal de Estados Unidos o los grandes bancos del mundo. No estoy a favor de poner puertas al campo de la Bolsa y de los mercados, pero sí me apunto a la tendencia, cada vez más creciente, de la necesidad que tienen los Reguladores de vigilar los movimientos, al existir sospechas fundadas de que se pueden traspasar líneas rojas de información privilegiada. Otro asunto, unido al anterior, es la propaganda continuada de las posiciones cortas sobre determinados valores, que generalmente no logran el éxito, que pretendía, pero sí ocasionan trastornos bipolares en algunos participantes en los mercados. O, lo que es lo mismo, propaganda para hacerles el caldo gordo a estos monstruos", me dice Juan P. economista y especulador en Bolsa, que recuerda:
¿Tienen los cortos información privilegiada?
Aumentan las sospechas. La Asociación Española de Accionistas Minoritarios de Empresas Cotizadas (Aemec) ha enviado una carta a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en la que insta formalmente a este organismo a que inicie tareas de investigación sobre las posiciones en corto y aclare cuantas posibles actuaciones infractoras y sancionables se deriven, dado que dichas operaciones están provocando una "merma de confianza" del mercado financiero español, así como del valor de las compañías.
En la carta, firmada por la directora ejecutiva de Aemec, María Fernández Conradi, y dirigida al presidente de la CNMV, Santiago Albella, se pide a la CNMV, como organismo de control y supervisor de las reglas de los mercados, que cumpla con sus obligaciones de vigilancia en aras de la protección y credibilidad de los mercados y en "obligada defensa" del interés de los millones de inversores que podrían sufrir perjuicio.
Según Aemec, es "obligatorio" que la CNMV evite una nueva situación como la ocurrida con las operaciones en corto que se han estado produciendo en el seno de Banco Popular, como ya advirtió la asociación al organismo supervisor el pasado 21 de abril, operaciones que, según Aemec, castigaron "severamente" el valor de la acción de la entidad financiera.
Tras las operaciones en Banco Popular y después de la "precaución" llevada a cabo con Liberbank, ahora la Aemec vuelve a reiterar su preocupación ante una situación que parece estar ocurriendo nuevamente en el mercado financiero español y se refiere en concreto a cotizadas como DIA, Técnicas Reunidas, Abengoa, Sacyr o el Grupo Prisa. "Si bien las posiciones cortas son legales, si éstas vinieran acompañadas del uso de información privilegiada, la ilegalidad sería fragrante", reiteran los minoritarios en la misiva.
Para Aemec, estas operaciones en corto no suponen sino un "comportamiento lejano" a lo que debe ser un mercado eficiente, transparente y que refleje el verdadero valor de la acción en protección del inversor. "Los accionistas de las distintas sociedades están viéndose afectados por un ataque despiadado perpetrado mediante operaciones especulativas en el mercado bursátil, que lo que está provocando es arruinar a una multitud de ahorradores", reitera.
Por último, asegura que estas operaciones son "muy graves" y que merecen una "seria investigación" por parte de la CNMV para dilucidar quién se encuentra detrás de las posiciones cortas y si hay personas que pudieran estar haciendo uso de información privilegiada en detrimento del valor bursátil de alguna de las mencionadas compañías.