La desincronización entre el análisis técnico y la estrategia, afectan las posiciones abiertas y venideras, porque evita que el objetivo de ambos coincida, desenfocándonos. La mayoría de traders no dan al análisis tècnico los roles correctos, es incorrecto limitarlo a la mera tarea de encontrar el momento para entrar en la tendencia. Es prioritario mejorar la eficacia del análisis tècnico otorgándole tres roles:
1. Adaptar la estrategia a la tendencia
2. Pronosticar el cambio de tendencia
3. Pronosticar la continuación de la tendencia
Sin el primer rol los restantes tienen como único objetivo, emitir una señal de entrada, es así como surge la desincronización. La estrategia se transforma en una especie de automóvil sin frenos, no tendrá mayor inconveniente mientras la pista carezca de curvas; en este negocio abundan. Él trader promedio suele experimentar un estado de desconexión, teme aceptar el estado real de la tendencia e insiste con mucha persistencia, a favor de una hipotética fluctuación del precio profetizada por la codicia, más no por el resultado de una estrecha comunicación con el entorno. Se desorienta porque la desincronización distorsiona, deformando los datos que envían la tendencia, la estrategia y el análisis tècnico, produciendo que se opere con información anacrónica. Mediante el siguiente relato aclararé el tema:
Al despertar descubre que olvidó escribir, hablar, leer y entender cualquier idioma; decide informar el raro suceso a su familia, quienes no entienden sus gestos, señas, mímicas, y palabras incoherentes. Se dirige al hospital, allá se topa con el mismo problema: Falla al transmitir el mensaje. ¿Qué haría en esta situación?
Al desglosar la historia hallamos dos estrategias: La ayuda de la familia y la del hospital; falló en ambas, porque carecía de una técnica adecuada para expresarse. El precio habla diferentes idiomas, uno durante la tendencia sólida y otro en la no sólida; el problema surge cuando las herramientas, usted y el mercado hablan distintos lenguajes. En la algarabía que se forma, la incoherencia gobierna, al punto que obliga al análisis tècnico a cumplir un nuevo rol: Seguir tendencias ficticias. La desconexión conlleva a poner dinero en pro de movimientos ilusorios, hay una amplia diferencia entre un pronóstico auspiciado por un plan de trading, versus, una proyección respaldada por un plan cuyos componentes están podridos.
Al examinar la tendencia siempre pregúntese: ¿el análisis contiene los tres roles?, ¿qué rol falta? , ¿está sincronizado con la estrategia? Recuerde que puede elegir entre: ser el principal enemigo o aliado del análisis tècnico. El trader moderno tiene al alcance demasiados indicadores, lo difícil es canalizar la información, la mayoría usa hasta el más insignificante dato para invertir, restando valor a decisiones que no siempre son del mismo linaje, unas nacen de las entrañas del orden, y, otras del desorden. Mientras el análisis tècnico sea coherente, es decir, contenga los tres roles, será armónico. Una mente mal entrenada cataloga las buenas decisiones como malas, y viceversa; percibe las decisiones desde el efecto, no examina la causa.
Para el trader experto el orden es sagrado, para protegerlo, precavidamente articula el análisis tècnico con la estrategia, por ende, se adapta eficazmente a los escenarios propuestos por el precio. El trader promedio está condenado a depender de la suerte, porque al interactuar con el precio, es desordenado y ambicioso; ambos males provienen de la desarticulación. Pregúntese: ¿qué me motiva a decidir? , ¿está desenfocado mi análisis tècnico?