Goldman Sachs, nuestro valor de la semana pasada, ha seguido subiendo estos días, en línea con las alzas de los principales índices americanos, que han vuelto a batir a los europeos una semana más. Seguimos pensando que Goldman es un valor a tener en el punto de mira, pero nos gustaría comprar sus acciones algo más baratas, aprovechando algún recorte, que pensamos vendrá, igual que han venido en el pasado.

Pero realmente el valor estrella de la Bolsa americana el pasado viernes fue el fabricante de microprocesadores Intel, que subió un 10,5% tras presentar sus cuentas del cuarto trimestre. La mítica compañía fundada en Mountain View por Robert Noyce y Gordon Moore (este último predijo que la capacidad de procesamiento de los "chips" iba a multiplicarse exponencialmente dando lugar a la famosa ley de Moore) y catapultada a las alturas por Andy Grove, quien afirmó que en el mundo digital "solo los paranoicos sobrevivirán", en un libro al que puso precisamente este título, sigue en primera línea competitiva tras varias décadas, respondiendo al reto de los nuevos entrantes, tal y como lo acreditan las cifras presentadas el pasado viernes.

El gráfico que hoy adjuntamos, que muestra la evolución bursátil de Intel los diez últimos años, se parece al que mostrábamos la semana pasada, de Goldman Sachs, ya que ambos reflejan una fuerte subida de la acción en los diez años, pero la subida de Intel es mayor que la de Goldman, y los recortes por el camino, que también existen, son mucho más moderados que los de Goldman.

En ambos casos, el de Goldman y el de Intel, la llegada de Trump a la Casa Blanca propició fuertes subidas, que han continuado hasta hoy y que han llevado la cotización de Intel desde los poco más de 30 dólares previos al triunfo de Trump a los 50,08 a los que cerró el pasado viernes.

Nos gusta Intel y creemos que con su PER de en torno a quince veces beneficios y con su acreditada capacidad de innovación y de adaptación a las cambiantes condiciones del mercado, es claramente un valor a tener en cartera. Pero, igual que en el caso de Goldman, nos gustaría comprarla más barata aprovechando algún recorte tras la escalada vertical que muestra el gráfico.