En numerosas ocasiones he afirmado en estas páginas que el control emocional, la serenidad de pensamiento, y el fijar unas metas vitales realistas y sociales, no solo incrementa sustancialmente las probabilidades de ser feliz, sino que también aumenta las probabilidades de tener éxito en los mercados financieros.

Existe una relación directa entre la serenidad vital de un operador y su éxito profesional. Hasta tal punto que en muchos bancos de inversión de EE.UU. se facilita la práctica de la meditación en la propia empresa, antes de empezar las operaciones diarias.

Recientemente leí un artículo de Brett Steenbarger, famoso psicólogo especializado en el trading financiero, que me resultó tremendamente ilustrativo de lo señalado anteriormente. Steenbarger decía:

Mi viaje en metro hoy al fondo de cobertura donde trabajo fue muy interesante. Estaba esperando en el andén al próximo tren, pensando en algo que había leído en el viaje en tren desde Connecticut a la ciudad. La esencia de esa lectura fue que, en tiempos bíblicos, la gente adoraba a Dios sacrificando animales. Hoy nuestra adoración puede tomar una forma diferente, al sacrificar nuestras necesidades y deseos animales, y usarlos para el crecimiento y el desarrollo espiritual. Así, por ejemplo, puedo trabajar como coach de inversiones con el fin de acumular dinero y cosas materiales, o puedo trabajar para convertirme en una parte significativa de la gente y usar el dinero ganado para mejorar a mi familia y al mundo. No es que peleemos contra nuestra naturaleza animal; es que la domesticamos, la elevamos y la dirigimos sabiamente. Podemos comer por gula o podemos comer por la salud.

En esto estaba pensando en el andén del metro cuando una mujer joven caminó frente a mí escuchando música y dando vueltas. De repente se giró, caminó frente a mí de nuevo y siguió bailando escuchando la música de sus auriculares. Cuando lo hizo por tercera vez, me sentí un poco molesto.

El metro llegó, subimos, y la Sra. Auriculares continuó con su baile dentro del metro. Iba a sentarme, pero noté que un hombre estaba acostado en el asiento. Estaba notablemente sucio y olía mal. Mi impresión fue que era una persona sin hogar. Me quedé cerca pero decidí no sentarme al lado del hombre.

La Sra. Auriculares, todavía bailando y sonriendo, se quitó el chal que llevaba, y con él cubrió al hombre tumbado.  Después le ofreció un pedazo de chicle. El hombre levantó la vista con ojos turbios, se quitó el chal, lo enrolló y lo usó como almohada. Ella me miró, los dos sonreímos, y ella continuó su baile.

Así que mientras yo estaba leyendo y pensando en usar el mundo animal y material para lograr un propósito más elevado, esta jovencita estaba realmente aplicando la lección. En su felicidad y su baile, ella se dio libremente, ajena a la apariencia y el olor del hombre.

La autenticidad se trata de vivir nuestras verdades, no solo de hablar sobre ellas o estudiarlas.

Si nos referimos ahora al mercado, ¿cómo de auténtico es su trading?

Si alguien lo mirara, ¿sabría decir cuáles son sus planes para este día? ¿Sabría en qué está trabajando?

Si no somos auténticos en nuestras inversiones, actuando de acuerdo con nuestras creencias y entendimientos, todos nuestros planes y entradas al mercado diariamente, estarán vacíos.

Hay un mensaje profundo en las acciones de la joven: Encontraremos nuestra autenticidad cuando vivamos nuestra alegría, y encontraremos la alegría cuando seamos quienes debemos ser.