El crecimiento económico es una variable flujo. Y su financiación también. La financiación bancaria sigue siendo fundamental en el crecimiento económico europeo.
Ayer conocimos las estadísticas que elabora el BCE sobre las emisiones de deuda por parte de los sectores residentes en la zona euro. El ritmo anual de crecimiento volvió a moderarse en mayo hasta un 1 % desde el 1,5 % del mes anterior.
La emisión nueva de deuda en euros por residentes alcanzó en mayo 576,2 m.M, pero con una emisión neta de 21,6 m.M. Todos los plazos de las emisiones moderaron su crecimiento, incluso con ligeras caídas en la variación del saldo de deuda a muy corto plazo. El saldo de deuda emitido por las empresas mantuvo un crecimiento anual del 6 %, las emisiones del sector público crecieron un 1,2 % medio punto a la baja desde el mes anterior y se registró un descenso del 0,1 % en la emisión de deuda desde los bancos.
En paralelo se acelera la financiación bancaria hacia familias y empresas.
Con datos también del BCE, el crecimiento en mayo de los préstamos al sector privado residente fue del 3 %, al alza desde el aumento del 2,7 % anterior. Aumentos del 3,1 % en los préstamos a familias y del 2,7 % en los dirigidos a empresas. Pero los préstamos desde los bancos al sector público caen un 3,6 % anual.
Los datos más recientes reafirman el protagonismo de la financiación bancaria a empresas y familias, lo que contrasta con la atonía en la financiación mayorista a los sectores residentes, especialmente a grandes empresas.