A corto plazo llega a su apogeo la temporada de resultados, mientras se acerca agosto, mes tradicional de vacaciones, de tendencia errática. A medio plazo la fortaleza de Wall Street sostiene las Bolsas europeas.
Se acerca agosto, mes tradicional de vacaciones para el mundo financiero y ya ha empezado a notarse esta semana en Bolsa. Ha sido un semana intrascendente y sin tendencia para la mayoría de mercados, con el temor a la guerra comercial de fondo, pendiente de los resultados empresariales, y animada por un discurso del presidente de la Fed, Jerome Powell, asegurando que no variará las expectativas de dos subidas de tipos en lo que queda de año, y dando además, un pronóstico optimista para los próximos dos años.
La guerra comercial, sigue de fondo, pero pierde protagonismo, al ver que China no responde a la última subida de aranceles de USA y se limita a intentar liderar una respuesta internacional contra los mismos. Mientras tanto, los resultados empresariales, sobre todo en Wall Street, van tomando protagonismo.
En las Bolsas españolas, Enagás ha dado el pistoletazo de salida de la temporada de publicación de resultados, pero será la próxima semana y la siguiente las que acumulen más publicaciones y sean más decisivas.
Así todo, las manos fuertes siguen fuera del mercado, y mientras esto no cambie no se verá una tendencia clara.
El Ibex 35 prosigue, el goteo hacia el suelo del triángulo, que sigue siendo el camino más probable. Si lo perdiese, lo que no parece probable a corto plazo, la banda de soporte de los 9.600-9.300 puntos, volvería a activarse.