Lo más destacable de la jornada de ayer es que mi indicador de volumen volvió a detectar en los tres índices actividad de los profesionales. En esta ocasión, albergo dudas sobre la motivación última de las manos fuertes. Aunque resulta probable que acumularan largos en previsión de una nueva ronda alcista que comenzase hoy mismo, también cabe la posibilidad de que hayan empezado a distribuir con cierta alegría al menos parte de su posición.
No en vano, hemos llegado a un cruce de caminos; del itinerario que tomen a partir de este momento los índices dependerá la prolongación o no de la fase ascendente de sus respectivos ciclos de 40 días.
Entretanto, dejemos correr las ganancias. Mientras no veamos una rotura a la baja de las líneas horizontales que proporciono en cada informe, nada hay que temer.
En ese sentido, sólo en el DAX se ha desplazado al alza su respectiva línea horizontal. Así, para activar una señal de la posible conclusión de la fase ascendente del ciclo, el Eurostoxx sigue estando obligado a romper a la baja la línea horizontal situada en 2.849,51; el Ibex 35 sigue estando obligado a romper a la baja la línea horizontal situada en 8.863,70; y el DAX debe romper a la baja la nueva línea horizontal situada en 8.578,01.
Permanezcan atentos.