Hoy analizamos a la compañía Distribuidora Internacional de Alimentación, que es una compañía que se dedica a la venta al por mayor y al por menor de productos alimenticios y otros bienes de consumo en los mercados nacionales y extranjeros.
Análisis fundamental:
La capitalización de la empresa asciende hasta los 1220,61 millones de euros. Sus fondos propios son 326,08 millones de euros y tiene una deuda a largo plazo de 924,57 millones. Esto hace que el ratio de deuda a largo plazo se encuentre en un 329,41%, mientras que la deuda total es del 436,98%. Esto significa que la compañía tiene una deuda tres veces superior a sus fondos propios.
La compañía tiene 612,14 millones de acciones en circulación. El resultado de explotación de 2017 fue de 1.811,95 millones de euros, con unos ingresos por ventas de 8.620,55 millones y un resultado neto del ejercicio de 109,58 millones. Esto representa una reducción de los beneficios de un 37% con respecto al año pasado.
El valor total de la compañía (enterprise value) es de 2.145,18 millones y el ratio EV/Ebitda es de 1,18 veces. Esto podría parecer muy bueno, si no fuera porque gran parte del EV es la deuda que acumula. La compañía necesitaría once años logrando los beneficios que obtuvo el año pasado para poder pagar la deuda al completo, esto sin contar los intereses de la misma.
La rentabilidad sobre los activos es del 2,91%, un ratio muy bajo, y la rentabilidad de los fondos propios es elevada, del 30,51%, pero le penaliza mucho la deuda.
La rentabilidad por dividendos es muy elevada, teniendo en cuenta que los intereses de la deuda y el principal de la misma son muy elevados. Tiene una rentabilidad por dividendo del 8,69%, algo poco sostenible.
En los últimos años solamente ha destruido valor para los accionistas a una media del -4,86% anual, mientras que las ventas han decrecido de media en el mismo periodo un -2,35%.
En los resultados del primer semestre de 2018, llegamos a la conclusión de que está siendo un año muy complicado para la empresa: ha sufrido una importante disminución de las ventas (un 10,32% menos que el primer semestre de 2017), con un aumento de costes (representan el 97,18% del total de las ventas), que le han llevado a una pérdida importante de márgenes. El fondo de maniobra es negativo y muy elevado (de -1.049,8 millones) y pierde capacidad de financiación propia.
Desde la entrada del fondo Letterone Investments, en el que participa Mikhail Fridman, las acciones únicamente han perdido valor. Tocó su máximo el 28 de julio de 2017 en los 5,97 euros y desde entonces, la tendencia ha sido claramente bajista, hasta los 1,99 euros que cotiza hoy.
A principios de año, el fondo se hizo con el 25% del capital de la compañía y la semana pasada se hizo con un 4% más hasta llegar al 29% del capital. A partir del 30%, el fondo estaría obligado a realizar una OPA por el 100%, pero en caso de hacerlo este año 2018, debería pagar el mismo precio que pagó en enero, 4 euros por acción. A día de hoy las acciones cotizan en 1,99 euros.
Parece probable entonces, que la OPA se haga a partir del año que viene para aprovecharse de los precios actuales, que supondrían un descuento importante sobre los 4 euros de enero. La compañía podría dejar de cotizar una vez sea opada, si el fondo lo considera oportuno. Esto podría llegar a darse en forma de privatización absoluta por decisión del fondo, aunque también podría dejar de cotizar si se declarara en quiebra.
Mi valoración por fundamentales es muy negativa, yo no entraría en el valor.
Análisis Técnico:
El sectorial de comida y bebida en Europa sube desde 2009 en términos mensuales, en las últimas sesiones ha perdido la directriz alcista que tenía desde marzo de este año.
En cuanto a la compañía, después de las fuertes caídas desde que entrase el fondo del magnate ruso, en estos momentos se mantiene en un rango lateral entre 1,847 y 2,27 euros por acción.
Parece probable que se mantenga dentro de ese rango en las próximas sesiones.
Mi valoración por técnico es muy negativa, pensando únicamente la posibilidad de entrada en corto si perdiese el nivel de 1,847 euros con objetivo 1,43 euros, antes de que tenga lugar la OPA.