A corto plazo con esta caída a mínimos de 2016, las Bolsas españolas no estaban tan baratas, en términos de PER, desde mediados de 2012. A medio plazo octubre está haciendo honor a su fama, aunque no se debe olvidar que octubre es el mes de los grandes cracs, pero también de las grandes remontadas.

Octubre negro en todas las Bolsas. Las tensiones de USA con Rusia y China, las de todo el mundo con Arabia Saudí, el endurecimiento de la política monetaria en USA y Europa, la guerra comercial de USA con todos, y la crisis de las emergentes, castigan las Bolsas en todo el mundo. Además, Europa tiene el Brexit y el desafío de Italia a la Unión Europea. La Comisión Europea ha rechazado el presupuesto de Italia y le reclama uno nuevo en tres semanas, algo a lo que Italia se niega. Es una decisión sin precedente, para la que la UE apenas dispone de pocos instrumentos, por lo que será la presión de los mercados la que fuerce un cambio, que se teme que contagie a otros países del entorno, incluida España. En esta situación, índices y blue chips presionan soportes, algunos ya están perdidos y otros dañados. Además, en España, se suma la crisis bancaria que ha desatado el Tribunal Supremo, que anunciará su decisión final el día 5 de noviembre. Probablemente obligue a los bancos a pagar los impuestos sobre actos jurídicos, pero limite la retroactividad a cuatro años como máximo. Es lo que descuenta el mercado.

El Ibex 35 ha caído hasta la directriz alcista iniciada en 2012, la presiona pero no acaba de perderla. Mientras no la pierda, se mantiene la posibilidad de un rebote. Si finalmente la pierde, puede llegar a caer hasta el entorno de los 8.000 puntos.