Las recientes caídas en los mercados han hecho pensar a más de un gestor que es el movimiento típico de las bolsas anticipando recesiones económicas. Históricamente los máximos de ciclo en los mercados de valores se alcanzan entre 6 y 12 meses antes de estas recesiones. Cada vez son más los analistas que apuntan a esta posibilidad. JP Morgan por ejemplo da una probabilidad del más del 40% a que EE.UU. (y otras economías avanzadas), entren en recesión en los próximos dos años.
El economista Guillermo Barba dice por su parte:
Ante las caídas en los mercados de acciones, obviamente saltan las alarmas y temores por una nueva recesión, pero hay quienes dicen que estos movimientos son solamente correcciones que ocurren en los mercados y argumentan que la economía de Estados Unidos se encuentra mucho más fuerte, y así lo muestran sus indicadores.
La tasa de desempleo y las solicitudes de subsidio al desempleo están en mínimos históricos, la confianza del consumidor está cerca de niveles récord y, además, con el crecimiento económico programado para llegar al 3.4% en el tercer trimestre.
Con estos datos, parecería que el pánico es exagerado. Pero basta recordar la frase que dijo Ben Bernanke, entonces presidente de la Reserva Federal (Fed) de EU, en enero de 2008:
“No estamos pronosticando una recesión”. Y todos sabemos qué ocurrió ocho meses después.
Los ejemplos nos indican que los datos presentes no siempre son evidencia de lo que ocurrirá más adelante porque, precisamente, es la información con la que contamos al momento y los indicadores económicos, naturalmente, recogen la información cuando las cosas ya sucedieron. Esta gráfica de más abajo, cortesía de Lance Roberts de Real Investment Advice, nos muestra cómo históricamente los mercados cayeron antes de que se declarara oficialmente una recesión en Estados Unidos.
Los puntos verdes marcan el punto más alto del S&P 500, el índice más importante de EE.UU. y el mundo, justo antes de caer, y los triángulos amarillos indican las veces que el Buró Nacional de Investigación Económica (NBER) declaró el inicio de una recesión. Como vemos, en casi todos los casos, el mercado siempre se anticipó.
“Hoy, una vez más, estamos viendo muchas de las mismas advertencias tempranas. Si han prestado atención a la tendencia de los datos económicos, el mercado de valores y la curva de rendimiento, las advertencias son cada vez más pronunciadas. En 2007, el mercado advirtió de una recesión 14 meses antes del reconocimiento de ésta”, dice Lance Robert en su artículo. Estamos de acuerdo.
El ciclo alcista de las bolsas todavía puede durar un tiempo más y no sabemos cuándo con precisión ocurrirá la próxima recesión. Pero el mercado ya nos está diciendo algo, y tomarán sus previsiones quienes sepan escucharlo.