"En las últimas horas he leído apuntes del siguiente jaez: los inversionistas en los Estados Unidos y Europa han huido de los fondos mutuos activos al ritmo más alto en al menos tres años, y han recaudado más de $ 30 mil millones en lo que va de 2019, ya que la selección de valores está bajo un intenso escrutinio". Otro más: vemos un mercado demasiado optimista sobre lo que pueden sugerir los rendimientos más bajos de los bonos, un empeoramiento de las perspectivas de crecimiento. Morgan Stanley reduce su asignación de acciones globales a la más baja en 5 años. Otra: La probabilidad de recesión de la Fed de Nueva York solo ha sido más alta 3 veces en los últimos 35 años. Cada uno de estos 3 escenarios anteriores fue seguido por una recesión dentro de los 6 meses siguientes. Y vistas y leídas estas y otras más cosas negativas más ¿Quién está comprando si hay tanto pesimismo?", me dice Peter L. analista anglosajón, seguidor de la Bolsa española, aunque reconoce que "cada vez hay menos títulos que seguir en el mercado español.
"Yo no tengo miedo a estos movimientos", prosigue. "La profusión de movimientos adversos en bonos y acciones de la primera economía del mundo vuelven locas a las máquinas. Sí, las máquinas enloquecen, porque, no cuentan con programas de medición de los sentimientos. Por eso, hoy marcan ritmo alcista en el petróleo y mañana lo contrario. Lo mismo sucede con el dólar ¡y qué decir de las Bolsas! Miedo y pánico de la mayor parte de los actores en los mercados ante las expectativas geopolíticas en medio, mundo y en el otro medio, también. Los gestores pierden los nervios, se dejan llevar por las emociones y abandonan lo que nunca deben abandonar: la disciplina...."
"Los inversores en Bolsa y en otros mercados deberían aprender a echar las redes en las aguas turbulentas, a pescar cuando todo el mundo abandona el río. Pero muy pocos lo hacen. El barullo de los mercados globales, ha estado propiciado, así, por la rectificación constante de posiciones, por el cambio de estrategias y por el trasvase de carteras: hoy desde los bonos a la liquidez y mañana, al revés. Ayer desde la Bolsa a la renta fija y antes de ayer, desde la liquidez a las acciones..."
"El final de este trasiego, de este tumulto, será la acumulación de pérdidas (para los clientes) y el consumo compulsivo de tranquilizantes y antidepresivos ¡Cuándo aprenderán estos bolsistas! ¿Qué hacer en este baile endiablado? Calma y recordar: si todo el mundo vende ¿Quién está comprando?..."