La intensificación de los conflictos comerciales ha provocado que el impulso del crecimiento mundial caiga a mínimos vistos por última vez durante la crisis financiera, y lo peor es que los gobiernos no están haciendo lo suficiente para evitar daños a largo plazo. como consecuencia de todo ello, la OCDE recortó casi todas las previsiones económicas que realizó hace tan solo cuatro meses, ya que las políticas proteccionistas se cobran un precio cada vez mayor de la confianza y la inversión, y los riesgos continúan aumentando en los mercados financieros.
El sector de los servicios ha demostrado ser excepcionalmente resistente al malestar hasta el momento, pero seguramente la debilidad persistente en la industria pesará en el mercado laboral, en los ingresos y en el gasto de los hogares. Los riesgos adicionales provienen de una desaceleración más acentuada en China y un Brexit sin acuerdo que podría empujar al Reino Unido a una recesión, reduciendo considerablemente el crecimiento en Europa. La política monetaria debería seguir siendo altamente acomodaticia en las economías avanzadas, pero la efectividad de esta política monetaria acomodaticia podría mejorarse si se acompaña de un mayor apoyo de política fiscal y estructural.
Mientras, las probabilidades de recesión económica en los próximos 12 meses siguen aumentando ligeramente.
Les dejo un gráfico que muchos inversores apreciarán. Se trata de qué hace el S&P500 cuando los bonos a 10 años suben 50 puntos o más en un mes.
En unos días escribo un artículo explicando un tema del que no se habla mucho y es muy delicado, afectando a todos: por qué los Bancos Centrales apenas tienen ya margen de maniobra y qué idea alternativa está comentándose de momento entre bambalinas.