Se cumplen cuarenta años y pico de una de mis entrevistas al entonces ejecutor de las órdenes del señor Botín en el parqué, ya muerto, de la Bolsa de Madrid. Excitado por presentar la entrevista al director del periódico recuerdo la pregunta del millón, sin saber en aquella época, como era, lo del millón "¿Qué cree usted que hará la Bolsa el mes de octubre?", le pregunté. Flemático y chulesco, como era, me contestó: "la Bolsa fluctuará, como lo hace siempre". Estrenamos mañana octubre. Un asunto recurrente en medios hablados, escritos y alguna televisión. Octubre es el mes de los miedos en la Bolsa: el 10 de octubre de 2008 el Ibex registró una caída del 9,1 %, la mayor caída intradía de su historia. El 19 de octubre de 1987, el Dow Jones bajó el 22,6 %, también la mayor caída intradía de su historia. Los grandes crash de la Historia de la Bolsa siempre se han producido en octubre. Por eso se le llama el mes de los miedos.
La estadística demuestra, no obstante, que es un buen mes de entrada en Bolsa, bajo la premisa de la anticipación a la recta final del año y principios del ejercicio siguiente ¿Por qué? Porque es en este periodo cuando se producen las entradas ciertas de dinero procedentes de fondos de pensiones y de los excedentes del ahorro. Pero supongamos que produce un crash, una nueva versión del pánico global ¿qué hacer? Comprar todo lo que se pueda (y deba, no vale acaparar acciones como si fueran barras de pan), porque detrás de un crash, siempre hay una oportunidad histórica de compra.
A continuación un análisis de Ben Carlson de Wealth of Common Sense, en el que compara los retornos del mercado de acciones de EE.UU. en la época posterior al crash del 29 (16 años) y después del crash tecnológico del 2000 (16 años). Llama la atención de este estudio que a pesar de que son probablemente las dos peores etapas de la historia (contadas en periodos de 16 años), el retorno del mercado de valores no se aleja mucho del bono a 10 años de EE.UU., y en el caso de la burbuja tecnológica, lo supera. Esto cobra especial valía si tenemos en cuenta que ambos periodos han sufrido dos grandes mercados bajistas que provocaron caídas de más del 50%. Entre 1932-1932 caídas del 80%. En 1937 caídas del 50%. Entre 2000-2002 y 2007-2009 la bolsa estadounidense se recortó a la mitad.
Desde el máximo de 1929 al máximo hasta 1945 (16 años de duración) el mercado de valores americano obtuvo una rentabilidad del 33,6%, lo que implica un 1,8% anual. Desde el máximo del 2000 hasta la actualidad (2016), el retorno ha sido de casi el 92% lo que implica una rentabilidad anual del 4,1%.
Durante estos dos periodos los mercados vivieron dos grandes mercados bajistas que provocaron caídas de más del 50%. Entre 1932-1932 caídas del 80%. En 1937 caídas del 50%. Entre 2000-2002 y 2007-2009 la bolsa estadounidense se recortó a la mitad.
En 1929 la rentabilidad del bono a 10 años de EE.UU. era del 3,4%, y el ratio CAPE del mercado de 32,5 veces. En 1945 la rentabilidad del bono era del 2,2% y el CAPE de 14,8x.
En el 2000 la rentabilidad del bono a 10 años era del 6,2% y el CAPE de 43,2 veces. En 2016 la rentabilidad es del 1,5% y el CAPE de 25,7x.
El siguiente gráfico muestra la rentabilidad total del S&P 500 en periodos de 16 a 25 años. Vemos que salvo excepciones, las rentabilidades son muy elevadas.