La pasada semana publicábamos un artículo en el que hablábamos del enfoque de la cartera permanente establecida por Harry Browne. Artículo que finalizaba de la siguiente manera: "¿Es esta la mejor forma de invertir? Pues cómo casi todas las preguntas en la vida, depende. Es evidente que no existe una cartera perfecta, pero también lo es que resulta fundamentar que las carteras se ajusten por un lado a nuestras expectativas de rentabilidad/riesgo, y por otro lado a las circunstancias previstas para el mercado en los años en los que queramos mantener las inversiones”. En el artículo de hoy retomamos esta idea, y planteamos las preguntas, que a juicio del famoso analista Adam M. Grossman, hay que contestar para establecer esa cartera “a salvo de catástrofes”. 

Veamos cinco preguntas: 

1. ¿Cuánto riesgo puede permitirse el lujo de tomar? Esta era la principal preocupación de Browne. Si está jubilado y necesita dinero de su cartera para pagar las facturas, no puede permitirse perder todos sus ahorros, pero puede permitirse perder algunos. Esta es una pregunta de simples matemáticas, y la respuesta le dirá cuánto puede arriesgar.     

2. ¿Cuánto riesgo necesitas tomar? Si comienzas tu carrera, querrás invertir en acciones para ayudar a que tus ahorros crezcan. Pero si ya ha ahorrado lo suficiente para la jubilación y sus otros objetivos, entonces no necesita correr ningún riesgo. Aún puede elegir, pero es importante reconocer cuándo el riesgo es opcional y cuándo se requiere.      

3. ¿Cuánto riesgo está dispuesto a correr? ¿Cuánto le afectan los altibajos regulares del mercado? ¿Cuánto te preocupa el tipo de riesgos extremos que mantenían a Harry Browne despierto por la noche?    

4. ¿Cuánto le importa mantenerse al día con el mercado?  En un día determinado, ¿con qué frecuencia escucha referencias al Dow o al S&P 500? Estos números se imprimen y recitan innumerables veces en los medios todos los días, por lo que es natural comparar sus resultados con estos puntos de referencia. 

Pero aquí es donde se pone difícil. Cuanto más se diversifique, más diferirán sus resultados de estos índices comúnmente citados, y eso conlleva un costo psíquico. A veces, lo harás mejor que el Dow o el S&P y, a veces, peor. Pero, independientemente de cómo le vaya, no puede hacer una comparación de manzanas con manzanas con estos índices principales, porque no puede cuantificar la tranquilidad que conlleva una mayor diversificación. 

5. ¿Cómo de importante es acumular el número máximo de dólares?  Si su objetivo principal es aumentar sus inversiones, ese es un objetivo muy diferente al de Harry Browne. Es un objetivo completamente válido, pero implicará una cartera muy diferente y probablemente implicará un viaje mucho más accidentado. 

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