A corto plazo aún es probable que las alzas se prolonguen, incluso hasta finales de enero, y el Ibex 35 siga subiendo con un objetivo en los 11.000 puntos. A medio plazo hace falta un recorte técnico que incluso podría un simple estancamiento.

La euforia se extiende por los mercados financieros ante una recuperación económica más fuerte de lo esperado. Se espera que el crecimiento mundial se fortalezca este año por el crecimiento de las economías en desarrollo (China, india, etc.) y la superación de la crisis de las economías desarrolladas. En estos pronósticos España es uno de los favoritos y la Bolsa y la deuda salen muy beneficiadas. Ahora se confía en que el grueso de los resultados empresariales, que han empezado a publicarse esta semana en Wall Street, apoye este optimismo. Además, el sector bancario descuenta una relajación de los requerimientos de capital a nivel global. Así, el BCE dice que aún no ha tomado una decisión pero que se inclina hacia un cuore capital de sólo el 6% en los stress test. Con la ayuda incondicional del BCE, que prima crecimiento sobre otras consideraciones, y la próxima Unión Bancaria el sector estará tranquilo hasta 2016.

El Ibex 35 podría empezar un recorte con un primer soporte en la directriz alcista acelerada iniciada a primeros de diciembre. Si rebota, aún podría subir hacia los 11,000 puntos antes de empezar un recorte técnico más profundo con límite en la directriz alcista iniciada en junio aunque es probable que no llegue ni a tocarla. La tendencia de fondo es alcista y los recortes son para comprar. Además, entra mucho dinero en Bolsa (como puede verse en el chart) por la falta de alternativas de inversión.