La semana pasada tuvimos pocas noticias y datos relevantes sobre la economía mundial, las políticas fiscales o monetarias y las cifras de la pandemia. En este entorno quizás sea significativo que el euro se haya fortalecido, lo que puede indicar que su tendencia -con menor resistencia- está en aumento. Ahora mismo, ni siquiera la falta de un acuerdo final sobre la estructura y condiciones del fondo de recuperación en la zona euro ha sido suficiente para hacer mella en la moneda común, que ha abierto en Asia el lunes por la mañana cotizando aún cerca de sus niveles más altos desde 2018.
Esta semana los mercados deberían moverse por la combinación de nuevos datos sobre la pandemia, el marco político y la información económica. La atención se centrará en el esperado anuncio de un nuevo paquete de estímulos fiscales por parte del gobierno de EE.UU. y las conclusiones de la reunión de la UE, sin olvidar la evolución de los datos de contagios y fallecimientos en EE.UU. La semana terminará con la publicación de los principales índices PMI de actividad empresarial en la zona euro para julio, donde seguimos esperando sorpresas positivas.
GBP
La libra esterlina fue la divisa que peor se comportó durante la semana pasada entre todas las del G10, ya que el rendimiento de los gilts -bonos del gobierno de Reino Unido- sigue evaporándose con noticias económicas más débiles de lo esperado y sin señales de progreso en las negociaciones de Brexit. Los débiles datos del PIB que conocimos la semana pasada corresponden al mes de mayo, por lo que no han sido demasiado significativos. Esta semana, los índices PMI de la actividad empresarial de julio deberían ofrecer una visión mucho más precisa de los repuntes registrados desde las caídas de abril. Esperamos que sorprendan al alza, y empezamos a creer que las recientes caídas de la libra han sido demasiado acusadas.
EUR
Tal y como esperábamos, la reunión de julio BCE que tuvo lugar la semana pasada nos dejó pocas noticias. El banco central considera (de forma razonable) que los programas puestos en marcha en los meses anteriores son, por ahora, suficientes, y puede permitirse adoptar una postura de espera. La atención se desplaza hacia el frente político, donde las conversaciones del Consejo Europeo en torno al fondo de recuperación y las condiciones han continuado hasta el final de la noche del domingo. Aún esperamos que se llegue a un acuerdo aquí, si no ahora, en una segunda reunión no muy lejana. Los PMIs de julio deberían seguir sorprendiendo al alza, sobre todo porque hasta ahora no se han vuelto a imponer las medidas de aislamiento a gran escala, a diferencia que en Estados Unidos. Estos datos, creemos, deberían ser suficientes para mantener la moneda común bien afianzada.
USD
La cifra de nuevos contagios por Covid-19 siguen sin disminuir en Estados Unidos, aunque esta terrible noticia no va acompañada (hasta ahora) de un aumento similar en el número de muertes. Además, el país está realizando más pruebas per cápita que cualquier otro. Hasta ahora, las noticias sobre el coronavirus se han ido compensando con un optimismo por los datos económicos y las perspectivas de hallar una vacuna. Sin embargo, las ayudas de 600 dólares semanales de subsidio por desempleo están a punto de terminar, y aumenta la presión sobre Trump y el Congreso para poner en marcha un cuarto paquete de estímulos fiscales. Esperamos ver un acuerdo -cuya magnitud será mirada con lupa por el mercado- esta semana. Un resultado decepcionante se traduciría en un problema para los activos de riesgo mundiales, aunque la reacción del dólar sería difícil de predecir.