Un panel de reputados expertos en Davos ha echado un jarro de agua fría sobre las afirmaciones que señalan que la crisis europea ha terminado, y advirtió que la zona euro se mantiene atrapada en una trampa de deuda, bajo crecimiento y riesgos olvidados por la recuperación económica de Estados Unidos.
Ambrose Evans (The Telegraph), nos comenta las preocupaciones que mostraron Axel Weber (expresidente del Bundesbank), Kenneth Rogoff (profesor de Harvard), Martin Sorrell (jefe de WPP) y Pierre Nanterme (presidente de Accenture) en Davos.
“Axel Weber, el ex jefe del Bundesbank alemán, dijo que continúa latente un trastorno subyacente y que la región podría enfrentarse a un ataque renovado al mercado durante este año.
"Europa está en peligro. Todavía estoy realmente preocupado. Los mercados han mejorado, pero la situación económica de la mayoría de los países no ha mejorado", dijo en el Foro Económico Mundial en Davos.
Weber, ahora presidente de UBS, dijo que los test de estrés bancarios del Banco Central Europeo de noviembre podría dar un nuevo susto a la deuda soberana, reactivando la crisis en los países mediterráneos.
"Los mercados están actualmente haciendo caso omiso a los riesgos, sobre todo en la periferia. Espero que algunos bancos no pasen las pruebas a pesar de la presión política. Y como ha llegado a quedar claro, habrá una reacción financiera en los mercados", dijo.
El profesor de la Universidad de Harvard Kenneth Rogoff dijo que la puesta en marcha del euro ha sido un "error histórico gigante", que ahora requiere un grado de unión fiscal y un fondo de resolución bancaria común para hacer que funcione, pero los líderes de la Unión Monetario Europea siguen negándose a tomar estos pasos.
"La gente ya no habla de que el euro se va a romper, pero el desempleo juvenil es realmente horrible. No pueden dejar que esta situación continúe durante otros cinco años", dijo.
Rogoff comentó que Europa está desperdiciando el "recurso escaso" de su juventud, tan necesaria para fortalecer una sociedad que envejece.
Mientras que Europa aún tiene grandes habilidades tecnológicas y leyes establecidas de derecho que son la envidia de la mayoría de los mercados emergentes, se corre el riesgo de que pierda el papel de actor importante en la economía mundial.
"Si estas tecnologías latentes no se hacen realidad, Europa se despertará de un largo letargo al estilo Japón, para darse cuenta de que tiene un papel mucho más pequeño, y mucho menos importante, dentro de la economía mundial".
Rogoff dijo que, a pesar de todo, al final asistiremos a una quita de deuda en la periferia de la eurozona, y cuanto más tiempo pase sin que los líderes tomen medidas audaces, más sufrirá la sociedad europea.
Weber, quien renunció al Bundesbank y al BCE tras una amarga disputa sobre la estrategia de la crisis de deuda del euro, dijo que las nuevas reglas "bail-in" para los tenedores de bonos de los bancos de la zona euro harán que los inversores actúen de forma preventiva, con el objetivo de evitar grandes pérdidas antes de que el BCE emita su juicio sobre los test de estrés.
"Podemos ver que los especuladores no esperarán hasta noviembre, y apostarán a ganadores y perdedores antes de eso", dijo.
El peligro es que vuelva la presión sobre los bancos de los estados soberanos que no puedan permitirse apuntalar sus sistemas financieros. Aunque no nombró a ningún país, España, Italia y Portugal son vistos como vulnerables. Incluso Irlanda puede de nuevo estar en riesgo con un ratio de deuda del 125% del PIB. "Este es el tema clave de este año", dijo.
Weber advirtió a los líderes de la UE que no se hagan "ilusiones peligrosas" o caigan en la complacencia acerca de la recuperación. "Las cosas parecen mejor de lo que son. La recuperación es muy débil para generar puestos de trabajo. No se trata de si las cosas están mejorando: Los niveles de crecimiento, el empleo y el PIB están mucho peor que antes de la crisis".
La cuestión de si Alemania está haciéndolo mejor que Francia es una distracción ya que el conjunto de la UEM lo está haciendo mal. "La música está sonando en los EE.UU. y en China. Hay un mundo ahí fuera que es más competitivo", dijo.
Martin Sorrell, jefe de WPP en Gran Bretaña, dijo que Europa está abandonando el campo de un nuevo orden mundial dominado por un "G2": EE.UU. y China, que estarán flanqueado por las economías emergentes de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China, y África del Sur) y los "Next Eleven" (Bangladés, Corea del Sur, Egipto, Filipinas, Indonesia, Irán, México, Nigeria, Pakistán, Turquía y Vietnam). Los EE.UU. y China se convertirán en las dos economías dominantes si Europa no cambia.
Francia se encuentra todavía en el "camino descendente de la U", y aunque España se está recuperando, no es suficiente para evitar una crisis política derivada de un desempleo juvenil masivo (57%). “La tecnología está ahora militando contra el trabajo, por lo que la desigualdad y el desempleo van a empeorar", dijo.
Pierre Nanterme , presidente y consejero delegado de Accenture, dijo que Europa está perdiendo la gran batalla por la competitividad, y corre el riesgo de una caída permanente donde una carga de deuda del 100% del PIB impide a los gobiernos liberarse mediante la inversión en conocimientos y tecnología.
Rogoff dijo que Europa lo tendría más fácil si el cambio del euro estuviera en 1,10 por dólar en lugar de 1,35.
Weber replicó que el euro caerá a la tierra ya que el endurecimiento de la política monetaria de la Reserva Federal de EE.UU. y de otros bancos centrales dejará a Europa como el tercero en discordia.”
Fuentes: Ambrose Evans - The Telegraph