La volatilidad se ha instalado en los mercados en el comienzo del año 2022, fundamentalmente de la mano de un tono más tensionador de la Fed en lo que respecta al ritmo de retirada de sus estímulos monetarios y cómo esto pueda afectar al crecimiento económico. De fondo, hemos asistido también a un incremento del riesgo geopolítico ante el tensionamiento del conflicto Rusia-Ucrania.
En el mes de enero los índices bursátiles más afectados por el sesgo más hawkish de la Fed han sido con los americanos, mientras que los europeos, y en especial el español, han registrado un mejor comportamiento relativo en las caídas, apoyados por el mayor componente cíclico y value, en el caso del Ibex de la mano de los bancos, Repsol, Telefónica, así como el sector turismo. En EEUU, S&P -5,3% en USD (-3,9% en euros) y Nasdaq 100 -8,5% en USD (-7,2% en euros), Eurostoxx -2,9%, Dax -2,6% e Ibex -1,2%. En cuanto a Emergentes, -1,9% en USD (-0,5% en euros), con una evolución diferencial entre Asia (China -2,9% en USD, -1,5% en euros) y Latinoamérica (+7,3% en USD, +8,9% en euros).
En los mercados de deuda, las TIRes 10 años avanzan con fuerza, especialmente en EEUU y Reino Unido ante la expectativa de retirada acelerada de los estímulos monetarios de Fed y Banco de Inglaterra en un contexto de inflación persistentemente alta y con presiones por el lado de los salarios. En EEUU, +27 pb hasta 1,78% (vs máximo anual 1,9%) y Alemania +19 pb hasta +0,01% (recuperando niveles positivos por primera vez desde 2019). Subida también en periféricos: España +18 pb a 0,75% y menor en Italia, +12 pb a 1,29%, ante la mayor estabilidad política en el país tras la reelección de Mattarella al frente de la República y manteniéndose Draghi como primer ministro.
En el mercado de divisas, apreciación del dólar vs euro del 1%, cerrando el mes en 1,12 USD/Eur, y tras moverse en un rango de 1,11-1,16 USD/Eur. La fortaleza del dólar sigue contando con el apoyo de una Fed que retirará estímulos monetarios antes que el BCE y un contexto de mayor aversión al riesgo que lleva a buscar refugio en el billete verde.
En el mercado de commodities, notable avance en el precio del crudo, +17% en enero, continuando con las subidas de diciembre (+10%) y marcando máximos desde 2014 ante una demanda sólida, mínimamente afectada por Ómicron y una oferta que continúa volviendo de forma muy gradual al mercado, a lo que se suma el incremento de tensiones geopolíticas. El Brent se movió en un rango de 77-85 USD/b.