La última sesión de la semana abre ligeramente al alza en Europa, después de una sesión ayer protagonizada por los números rojos por el tono más hawkish de BCE y Banco de Inglaterra ante una inflación persistentemente alta. Un giro, en el caso del BCE, que debería seguir apoyando una mejor evolución relativa de value frente a growth. Hoy la vista estará puesta en el informe oficial de empleo en EE.UU., con previsión de una muy débil creación de empleo por impacto puntual de Ómicron (+125.000 nóminas no agrícolas vs +199.000 anterior), con tasa de paro estable en 3,9% y aumento de presiones salariales (+5,2%e vs +4,7%).
A destacar la enorme volatilidad del Nasdaq: ayer -4%, mayor caída desde sep-20, lastrado por valores como Meta (Facebook -26%, su mayor caída diaria, ante unos resultados y guía débiles), aunque los futuros esta mañana avanzan +2% tras las buenas cifras de Amazon (cotización +19% en “after hours”), que se suman a otras compañías con sólidos resultados como Apple o Microsoft.
El BCE ayer mantuvo sin cambios su política monetaria, aunque el tono de Lagarde fue más hawkish de lo esperado, al reconocer que los riesgos sobre la inflación están sesgados al alza, sobre todo en el corto plazo, lo que lleva al mercado a elevar sus expectativas de que la primera subida de tipos se adelante a 2022 (descuenta +40 pb para fin de año vs +25 pb antes de la reunión), especialmente en la medida en que Lagarde no lo descartó al no repetir sus palabras de dic-21 de que “una subida de tipos en 2022 es muy improbable”. Esperamos que el BCE revise sus previsiones de inflación para 2022 en la próxima reunión (10-marzo), desde el actual +3,2%, teniendo en cuenta que en enero se sitúa ya en +5,1% y con expectativas de seguir subiendo en febrero y marzo por la presión adicional del coste energético (vs +4,1%e por BCE para 1T22). Asimismo, será clave ver cómo varían las estimaciones de IPC para 2023-24, actualmente en 1,8%, y por tanto por debajo del 2% objetivo a medio plazo. Será con ese cuadro macro actualizado en la mano cuando el BCE pueda ofrecer más detalle sobre el ritmo de retirada de sus estímulos, que aun con todo esperamos más lento que en el caso de EE.UU. o Reino Unido por su distinto momento cíclico y de mercado laboral.
Recordamos que el BCE no tiene intención de empezar a subir tipos hasta que finalicen las compras de deuda (PEPP finalizará en marzo-22, pero aumentando el APP para favorecer la transición a un escenario de menor liquidez, y con previsión de que el APP se mantenga al menos hasta 3T22), aunque la cuestión estará en si las compras de deuda finalizan antes de lo esperado (esto podría tener un impacto más negativo en deuda periférica) y con ello se adelantan las subidas de tipos. El mercado reaccionó con avances en el Euro (>+1% vs usd hasta 1,146), subidas importantes en TIRes (10 años Alemania +10pb hasta 0,14%, España +16pb a 0,94%, Italia +21 pb a 1,64%) y retrocesos en las bolsas (-2% en Europa, con Ibex con mejor comportamiento relativo, -0,3%, ante el fuerte avance de la banca).
Por su parte, el Banco de Inglaterra también cumplió con las expectativas del mercado al subir +25 pb hasta 0,5%. Sigue así a una primera subida sorpresa en dic-21 (+15 pb), la primera desde 2004, aunque lo más llamativo es que casi la mitad de los miembros con derecho a voto del BoE (4 de 9) votaron por subir 50 pb, lo que sugiere que es previsible ver nuevas subidas en las próximas reuniones de marzo y mayo hasta 1% para cerrar el año en 1,5%. El mercado descuenta que los tipos se sitúen en el 1% para mayo, ante una previsión de inflación que sigue revisándose al alza (pico 7,25% en abril vs 6% anterior). La reducción de balance comenzará en marzo con la no reinversión de vencimientos de deuda, tal y como anunciaron, aunque el propio BoE ha afirmado que espera un impacto limitado.
Principales citas empresariales En Francia presentarán resultados Sanofi y Vinci
En Francia presentarán resultados Sanofi y Vinci.