Apertura a la baja en las bolsas europeas en un contexto de riego geopolítico al alza (conflicto Rusia-Ucrania se recrudece, Moscú se anexiona territorios de Ucrania y los defenderá “por cualquier medio”, Gazprom suspende envíos de gas a Italia), a lo que se suman preocupaciones en torno a la situación en Reino Unido (OBR, la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria, analizará el plan de estímulo propuesto por el gobierno, mientras que la agencia de calificación crediticia S&P rebaja la perspectiva de Reino Unido a negativa) y respecto a Credit Suisse (que busca tranquilizar a los inversores sobre su posición de capital y liquidez tras subir sus CDS a máximos de la GCF, Gran Crisis Financiera). Todo ello tras un dato de inflación en EEUU el viernes (deflactor del consumo privado subyacente repuntando de 4,7% a 4,9%) que llevó a los índices americanos a caer 2%/3% desde los máximos del día y a cerrar en mínimos intradiarios.
Empieza la semana en Japón con malos datos del índice manufacturero grande Tankan del 3T22, que sigue deteriorándose, mientras que el dato final PMI manufacturero de septiembre se revisa a la baja ligeramente respecto al preliminar. Hoy tendremos también PMIs manufactureros finales en la Eurozona, que esperamos que confirmen el retroceso mostrado por el preliminar, mientras que en los casos de España e Italia serán primeras lecturas y deberían también retroceder. En EE.UU., por el contrario, debería mostrarse más resiliente, con mejora frente al mes anterior, aunque la atención estará en el ISM manufacturero, que podría seguir moderándose, aunque manteniéndose en zona de expansión y con la atención en los componentes de empleo y precios.
De cara al resto de la semana estaremos atentos a la reunión de la OPEP+ (miércoles), que podría anunciar mayores recortes en la producción de crudo que los de la última reunión (100.000 barriles por día, meramente testimonial). Rusia demanda recortes de hasta 1 millón de barriles diarios con el objetivo de frenar las caídas del petróleo, con el Brent actualmente un 10% por debajo de los niveles anteriores a la invasión de Ucrania ante los temores de una menor demanda en un contexto en el que aumentan los riesgos de recesión.
En el plano macro, la atención de la semana que viene se centrará en EEUU, y especialmente en los datos de empleo de septiembre: encuesta de empleo privado ADP (miércoles) e informe oficial de empleo (viernes). Aunque se espera moderación en el ritmo de creación de empleo (nóminas no agrícolas +250.000e vs +315.000 anterior), el mercado laboral se mantendría cercano a pleno empleo (3,7% tasa de paro estable) y los salarios seguirían creciendo a buen ritmo (+5,1%e vs +5,2% anterior), favoreciendo la continuidad en las subidas de tipos de la Fed. El mercado descuenta +50/+75 pb en la próxima reunión (2-noviembre) hasta 3,5%-3,75% y un nivel de llegada en torno a 4,5% en 2023. También tendremos datos americanos de ISM servicios de septiembre, que mostraría cierta moderación pero con un ritmo de actividad resiliente.
En el contexto actual, nuestra visión de mercado continúa siendo prudente en un entorno de elevada incertidumbre y un entorno macroeconómico cada vez más débil. Continuamos en un escenario de inflación elevada sin que se vea el pico en los próximos meses, especialmente en Europa, donde los riesgos adicionales derivados de la crisis del gas hacen complicado encontrar un techo. En este sentido, consideramos que un techo de inflación que logre cambiar de sesgo las políticas monetarias derivando en una menor presión sobre ciclo y beneficios será la clave para un cambio de dirección consistente de las bolsas.