Vemos pronósticos todos los años, a menudo revisados durante el año. Lo que no pueden explicar a futuro son muchas cosas: Covid, guerras, desastres climáticos y derrocamiento de gobiernos, por nombrar algunos. Si los traza, los eventos inesperados ocurren con regularidad. Tienden a llevar a la gente al paroxismo. Posteriormente, la gente reacciona, lo que resulta en mercados cambiantes. En el largo plazo, estos eventos, al menos hasta la fecha, no tienen ningún efecto negativo.

Entonces, ¿cómo se mantienen los pronosticadores en el negocio? 

Nuestros cerebros odian la incertidumbre. Odiamos la pérdida, en general, el doble de lo que nos gusta ganar ("aversión a la pérdida" - véase Kahneman/Tversky. Anhelamos el refuerzo de que debemos permanecer en el juego. Creemos que los pronósticos brindan cierta certeza de que alguien sabe lo que hará la máquina del mercado. Podemos adoptar la narrativa lógica asociada con el pronóstico cuando se alinea con lo que queremos creer. De esta manera, podemos tomar decisiones positivas, agresivas y agradables con un (falso) nivel de certeza. Los pronosticadores permanecen en el negocio porque los mantenemos en el negocio. Premiamos a sus empresas con nuestro dinero. Estas personas están en todas las noticias.

Los usos tradicionales de los pronósticos suelen ser a menudo en su mayoría destructivos.

Cuando digo esto, me refiero a los inversores no profesionales, cuyo objetivo generalmente es encontrar algún momento en su vida, más temprano que tarde, en el que pueda decir: “No necesito trabajar y puedo vivir la vida que quiera. Disfrutar sin preocuparte por el dinero.

Si usted es un inversionista, y estoy distinguiendo a los inversionistas de los especuladores, está claro que hacer cambios sustanciales y frecuentes en su cartera reduce sus rendimientos. Hay muchas investigaciones que encuentran que la ansiedad y el estrés son perjudiciales para su salud mental y tal vez física.

Estos son los rendimientos por clase de activo de los últimos diez años. Pocos pronosticadores eligieron, en 2020, las materias primas como la inversión de mayor rendimiento para 2021 y 2022, y mucho menos los rendimientos consecutivos del 38% y el 22%. Las acciones chinas son las ganadoras de 2023 hasta la fecha, lo que me sorprende y probablemente a usted también (intente buscar en Google "noticias negativas sobre China"). Lo que este gráfico dice claramente es que predecir el rendimiento anual de una clase de inversión/activo es un juego de perdedores.

Si hay una manera de convertir este rendimiento aleatorio en un proceso de predicción repetible y coherente, nadie me lo ha mostrado todavía. Siendo realistas, si alguien pudiera hacer esto, tendría todo el dinero del mundo para invertir.

Lo que sí creo que puede ser útil sobre los pronósticos es reforzar esto: casi siempre hay una amplia gama de resultados potenciales. Cada año, prepárese para la variabilidad.  Haz tu mejor esfuerzo para aceptar la imprevisibilidad. 

¿Qué se puede hacer? 

Estadísticamente, el pronóstico más preciso es decir: “No tengo ni idea. Lo que sí sé es que los períodos largos, en los que se realizan pocos cambios, históricamente han sido extremadamente gratificantes para los inversores”. También podemos señalar, con bastante precisión, que sucederá algo que no podíamos predecir. 

Indiscutiblemente, la capitalización funciona si no la interrumpes. Establezca un conjunto de hábitos y rutinas para minimizar las interrupciones agravantes y evitar reaccionar a las previsiones. 

Ignore a los pronosticadores. Su trabajo es vender clics, globos oculares y, al final, publicidad. Ninguno de ellos es responsable del éxito de su inversión, ni ninguno de ellos tiene responsabilidad alguna por su bienestar financiero o por lo que Brian Portnoy titula en un libro: "Ignore a los pronosticadores de mercado". 

Fuente: Mark Newfield.

Lacartadelabolsa.