Estamos experimentando un mes de Abril con unas temperaturas jamás vistas y donde esta semana alcanzaremos más de 30 grados en buena parte de las provincias españolas, además en 2022 tuvimos el año más caluroso del que se tienen datos históricos con una temperatura que en España fue de casi dos grados superior a la media de la serie histórica que va de 1980-2010.

Sabemos que las emisiones de CO2 y de otros gases de efecto invernadero son los impulsores principales de estos cambios climáticos que está experimentando el planeta, pero aún sigue habiendo quienes argumentan que este cambio de temperaturas no es importante, tildando de alarmistas a quienes lo defienden y argumentando que apenas ha subido 0,7 grados la temperatura del planeta de media en los últimos 50 años.

Si miramos el gráfico que facilita el Met Office Hadley Center vemos que desde 1970 el incremento medio en el planeta efectivamente se ha dado y ha estado de media entre 0,8 y 1 grado, si atendemos únicamente a este dato puede parecer un problema escasamente relevante y al que no hay que prestar excesiva atención como tildan aquellos que quieren quitar importancia al cambio climático que está experimentando nuestro planeta, pero hay una serie de temas que deben analizarse en mayor profundidad cuando hablamos del tema y aquí se los vamos a exponer.

El crecimiento económico y demográfico ha impulsado el que ahora mismo estemos con las mayores emisiones antropogénicas de gases efecto invernadero que se hayan dado nunca, las concentraciones atmósfericas de dióxido de carbono, metano y óxido nitroso han alcanzado niveles sin precedentes y este incremento de emisiones ha coincidido con la elevación de las temperaturas medias en el planeta.

El cambio climático no es uniforme y afecta más a unas zonas que otras

El que se este produciendo este cambio de temperaturas en el planeta trae consigo cambios físicos, ecológicos, inundaciones, sequías, olas de calor, alteraciones en el crecimiento de los cultivos, aumentos en el nivel del mar., etc… Y es que el cambio climático no se está produciendo de igual manera en todas las partes del planeta, para empezar está siendo superior en el hemisferio norte que en el hemisferio sur, siendo en el hemisferio sur de apenas 0,5 grados frente a los 1,2 grados del hemisferio norte, al estar más afectadas aquellas regiones con mayor densidad de tierra que de mar que ayuda a reducir levemente las cantidades de CO2 existentes.

Ese cambio de un grado de temperatura además enmascara oscilaciones mucho más grandes e impactos y cambios muy significativos en buena parte del planeta, ya que es un análisis donde tiene en cuenta todo el area oceánico donde se produce un cambio climático inferior y donde sabemos que los oceanos ocupan el 70% de la superficie terrestre.

En el mapa superior del planeta podemos observar la desviación de las temperaturas en 2019 con respecto a la media entre 1950-1980 donde comenzaron las emisiones masivas de CO2 y otros gases con efecto invernadero en el planeta, aquí podemos ver claramente que las regiones que han sido más afectadas por dicho cambio climático han sido las zonas donde existe una mayor proporción de tierra donde las oscilaciones estarían por encima de los 3 grados y de una mayor manera en el norte del planeta con especial significación en los dos polos de nuestro planeta donde los cambios de temperaturas superan los 5 grados de promedio y alcanzando puntos donde la oscilación llega hasta los 7 grados., el posible impacto ecológico que está teniendo este cambio es más que importante en cuanto al hielo marino y al derretimiento de los glaciares.

De tal manera que el cambio climático no hay que entenderlo únicamente atendiendo a esa oscilación de menos de un grado en los últimos 50 o 60 años que se ha producido en el planeta sino teniendo en cuenta que ese cambio climático se distribuye de muy diferente manera alrededor del planeta.

La acumulación del Co2 atmosférico no se absorve y las temperaturas seguirán subiendo

Las concentraciones de Co2 atmosférico se han incrementado especialmente en los últimos 50 años pasando de unos niveles de 300 ppm a más de 400 ppm, las mayores acumulaciones se deben principalmente al cabono liberado por la quema de combustibles fósiles y en menor medida a la deforestación y otros usos de la tierra, pero ese CO2 también es absorvido por el oceano principalmente, la tierra y los suelos, permaneciendo aproximadamente la mitad de los gases en la atmósfera y siendo absorvidos de manera muy lenta con el tiempo nuevamente por los oceanos o los árboles que al morir vuelven a liberar el Co2 absorvido (de ahí el problema de la deforestación de los bosques).

Ahí es donde reside el enorme problema al que nos enfrentamos con las emisiones de CO2, el problema es que estas se acumulan en el aire provocando un efecto similar al de una bañera que se va llenando y que tiene un grifo abierto, estas concentraciones de CO2 en la atmosfera se siguen acumulando y no desaparecen hasta pasados muchos años en que son absorvidas por el planeta.

El problema es que las emisiones de CO2, pese a la mayor concienciación social por el cambio climático, siguen y siguen creciendo y aún no hemos tocado techo, el objetivo igual que lo fue en la pandemia es ver cuando en el planeta conseguimos alcanzar el pico de emisiones para desde ahí que comiencen a bajar, pero el ritmo de absorción de esas particulas resultantes en el aire será muy inferior por lo que aún cuando alcancemos el pico aún seguiremos incrementando los niveles de partículas de Co2 por millón en la atmosfera lo que traerá consigo máyores incrementos de la temperatura, tenemos el grifo abierto y aún sale un ritmo de gases cada vez mayor, siendo el objetivo simplemente ver cuando ese grifo comenzará a emitir a un ritmo de gases inferior, para a partir de ahí ver cuando podremos cerrarlo.

Es decir, tenemos actualmente un objetivo a medio plazo que es alcanzar el pico de emisiones de CO2, cambiando la quema de combustibles fósiles más contaminantes (carbón) a otros menos contaminantes (gas natural) objetivo fijado a medio plazo y no antes de 2030/35 para a mas largo plazo establecer un objetivo de alcanzar las emisiones 0 de Co2 que unos paises fijan en 2050 y otros en 2070.

¿Pero hasta entonces que va a ocurrir en nuestro planeta?

Si ese leve cambio de apenas 0,7 grados causado por el enorme incremento de las emisiones de Co2 esta ocasionando ya efectos a nivel ecológico, ambientales y de salud especialmente en algunos puntos del planeta, ¿qué puede venir si aún estamos tan lejos simplemente de alcanzar el pico de emisiones de Co2 (actualmente en más de 38.000 millones de Toneladas)

Podemos estar enfrentándonos a un problema muy serio ya que aún estamos en la fase de conciendiación social (con algunos sectores sociales que aún se oponen al cambio climático), los paises de momento sólo desean reducir sus emisiones y en muchos casos a un ritmo muy lento lo que conducirá a alcanzar un pico de emisiones aún difícil de determinar ya que algunos paises como China o India siguen haciendo crecer sus emisiones de Co2 de manera muy significativa, mientras otros paises entre los que se encuentran Alemania, Gran Bretaña, Estados Unidos o España parecemos haber alcanzado el pico de emisiones y comenzado a cerrar el grifo para que al menos el creciemiento de las particulas de Co2 en la atmosfera no siga incrementándose al ritmo que lo hacia aunque aún lo siga haciendo a un ritmo intenso.

La verdad es que las actuales políticas que ya se están implantando para ralentizar las emisiones de Co2 van a tener un impacto sobre el futuro calentamiento global y se estima que de no haber hecho nada en 2100 tendriamos un planeta con entre 4,1/4,8 grados más de temperatura media. El problema es que con las actuales políticas las previsiones son que sigamos sintiendo los impactos del cambio climático y que a finales de este siglo se sufra un impacto a nivel global de un incremento medio de las temperaturas de otros 2 grados, el doble de lo que hemos experimentado en los últimos 60 años con unas consecuencias difícilmente cuantificables.

El compromiso está siendo asumido por algunos paises en mayor medida que otros y la pandemia del covid ha traído consigo un freno en el intento de reducir as emisiones de CO2 y en el proceso de descarbonificación por parte de muchos paises, el uso de las energías limpias aún está muy lejos de ser una realidad ya que no cubren más que una pequeña parte de la demanda de energía que necesita el mundo. El reto lo tenemos ante nuestros ojos e interesa que todos seamos conscientes de lo que nos viene por delante.