"Los que manejan los hilos, los que tiene el dinero o la autorización para moverlo por cualquier parte del mundo global, se han retirado a sus cuarteles de invierno en lo que respecta a las Bolsas y mantenido una presión compradora constante en los mercados de bonos. Eso significa que los Grandes del Mundo están convencidos de que los tipos de interés permanecerán en niveles muy bajos durante algunos años más, salvo en Estados Unidos, donde afloran ya tensiones entre los miembros de la Reserva Federal, y que las Bolsas ya no ofrecen la calidad que ofrecían hace unos meses. Dinero seducido, así, por los bonos, pese al magnífico recorrido de los periféricos en los últimos meses, y más remiso a tomar posiciones en la Bolsa, por ahora. En los dos casos, no obstante, hay una premisa que conviene considerar y que muchos participantes en los mercados parecen haber olvidado: el mercado actual, sea de bonos o de acciones, no va a admitir decepciones de tipo alguno. Cualquier decepción será marcada a sangre y fuego..."
"¿Decepciones para los bonos? Que las Cuentas Públicas muestren mayor debilidad de la prevista en los próximos meses y que los países que tienen que seguir acometiendo reformas estructurales, entre otros España, abran un paréntesis, una especie de vacaciones por aquello de los diferentes procesos electorales..."
"Pero hablemos de Bolsa. Todos sabemos que la Bolsa española, como otras tantas Bolsas de provincias, son clones perfectos de Wall Street, aunque con tendencia a exagerar más los movimientos de fondo negativos, que los positivos, que es lo que estamos observando en los últimos cinco años. Todos sabemos, también, que, llegado un momento, la cuerda se rompe por el lado más débil y lo que era un clon pasa a ser un espanta pájaros. Desde siempre, hay dos principios básicos, inamovibles, que han hecho que las cotizaciones en Bolsa suban o bajen: el crecimiento económico y los beneficios empresariales, dos factores, que, con la deslocalización empresarial, ya no van de la mano, pero que en el cómputo global a la hora de efectuar cálculos en la valoración sirven perfectamente ¿Cuál es la fotografía de la Bolsa española, en particular, y la de las del resto del mundo, en general?..."
“...En España, en Gran parte de Europa, China y Japón fallan las dos premisas y en USA, la de los beneficios. Por eso, conviene seguir muy de cerca los indicadores adelantados..."
"Respecto a los resultados el mercado lleva ya mucho tiempo preguntándose si los márgenes empresariales han tocado techo, lo cual sería una amenaza para el mercado de valores..."
"En una nota de investigación de Morgan Stanley, el estratega Graham Secker ofrecía hace algún tiempo una mirada mucho más amplia de esta cuestión, una mirada que está de máxima actualidad.
Este analista muestra que durante 40 años la dirección principal de los márgenes era bajista, antes de tocar fondo en los años 80. A partir de ese suelo, los márgenes desarrollaron una tendencia alcista de 30 años de duración, principalmente por estas cinco razones:
1. Un período increíble de avances tecnológicos.
2. Menores tipos de interés.
3. Menores impuestos corporativos.
4. Aumento de la subcontratación.
5. Reducción de los precios reales de los productos.
El escenario futuro que se nos plantea es que no hay previsiones de tipos de interés mucho más bajos (al contrario, la tendencia de tipos es a subir en los próximos años), y no se espera una nueva revolución tecnológica como la vivida con los ordenadores e Internet desde los años 80.
La conclusión de este analista, es que tras 30 años de subidas de los márgenes operativos, nos encontramos a las puertas de un giro estructural bajista de estos márgenes, lo que sin duda afectará a las ganancias empresariales en todo el mundo, y a las valoraciones en bolsa..."
(De la conversación mantenida con uno de los principales traders de la Bolsa española)