A corto plazo se pueden ir aprovechando los recortes para ir tomando posiciones de cara a abril, pues marzo es estacionalmente plano en las Bolsas españolas. A medio plazo, pasado abril, empiezan seis meses estacionalmente malos.
Las Bolsas, en todo el mundo, se han estancado concentrándose toda la atención de los inversores en la resistencia de los 1.850 puntos del Standard & Poor’s 500. Apenas se hace caso a otros factores, como datos macro o noticias económicas, y nadie quiere arriesgarse hasta ver si se pasa o no definitivamente esta resistencia. Dada la importancia de la misma es necesaria consolidarla con dos cierres consecutivos. Mientras tanto, las Bolsas no suben pero tampoco bajan pues, igual que pocos quiere arriesgarse a comprar, pocos quiere arriesgarse a vender. Así, las pequeñas correcciones son aprovechadas para volver a comprar, incluso en el mismo día, pues a pesar del tapering, sigue habiendo mucha liquidez en los mercados. En Europa también preocupa la crisis de Ucrania y su riesgo de default mientras en las Bolsas españolas empieza un mes, el de marzo, muy plano según pautas estacionales. Luego abril, estacionalmente mucho más alcista, pone punto final al medio año más alcista que empieza en octubre.
El Ibex 35 depende, como el resto de índices, de la resistencia se los 1.850 puntos del S&P 500. A medio plazo manda el lateral de los 9.650-10.550 puntos con soportes y resistencias intermedios en los 9.950 puntos y 10.200 puntos. Curiosamente el soporte-resistencia sicológico de los 10.000 puntos es ignorado por el mercado.