Cuando montar la oficina en casa no es una opción, el alquiler del espacio de trabajo es uno de los mayores gastos a los que debe hacer frente un emprendedor que quiera poner en marcha un negocio. Sin embargo, según un estudio realizado por el portal inmobiliario pisos.com, esto no tiene por qué ser así si se opta compartirlo con otros autónomos. De este modo, la renta puede reducirse hasta un 52%.
El informe de pisos.com analiza la renta mensual de alquiler y el tamaño de cerca de 10.000 oficinas de alquiler en toda España. Así, las superficies de menos de 60 m2, que son idóneas para poner en marcha un negocio en solitario, tienen un precio medio de 389 euros mensuales. Por su parte, la renta de las superficies a partir de 150 m2 asciende a 3.678 euros, un precio que se puede compartir con más de 20 personas1 reduciendo el importe a 184 euros mensuales.
Coworking: ahorro y sinergias
Según el director general de pisos.com, Miguel Ángel Alemany, “igual que sucede con la vivienda,compartir oficina es la opción más económica para tener un espacio propio donde desarrollar la actividad empresarial. Actualmente existen numerosas iniciativas públicas y privadas que proporcionan este espacio a los emprendedores, pero por un tiempo limitado, por lo que unirse, compartir oficina y crear un espacio de coworking es una opción cada vez más común”.
Aparte de ahorrar en alquiler y gastos corrientes como la luz o el agua, la red Wi-Fi o la limpieza, compartir oficina tiene ventajas sobre el alquiler tradicional que hay que tener en cuenta. Según Alemany, “la rentabilidad puede ir más allá de lo estrictamente económico si buscamos a compañeros con los que podamos aprovechar las sinergias y el intercambio de ideas”.
1 Según el Real Decreto 486/1997, de 14 de abril, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo cada persona debe tener un mínimo de dos metros cuadrados de superficie libre y 10 metros cúbicos, no ocupados, por trabajador.