Euro Stoxx 50
El único cambio reseñable en este índice es que la línea horizontal se ha movido. Eso sí, se trata de un movimiento liliputiense. Así, para activar una señal de la posible conclusión de la fase descendente del ciclo, el precio debe romper al alza la nueva línea horizontal situada en 2.934,90.

Entretanto, estamos a la espera de ver si la vibración de Gann que figuraba ayer y la que aparece hoy consiguen insuflarle algo de vida al Eurostoxx. A todo esto, mientras el precio no rompa el mínimo marcado el 30 de septiembre, no cabe esperar que la onda sinusoidal modifique su pronóstico.

Ibex 35
Acuciado por las vibraciones de Gann y por el techo teórico (TT), el índice español se halla en un monumental cruce de caminos de cuya salida dependerá que asistamos a una nueva extensión de la fase ascendente o al ingreso del ciclo en su fase descendente. De hecho, basta con mirar la cercanía del precio a la línea horizontal situada en 9.260,40 para cerciorarse de que cualquier latigazo bajista adicional conducirá a la muerte inexorable de la fase ascendente, máxime si nos fijamos asimismo en el oscilador de confirmación, que ocupa una posición muy próxima al nivel cero.

DAX
Con el soporte situado entre 8.539,24 y 8.508,17 todavía vivo, el índice alemán debería reaccionar de forma positiva ante la presencia de dos vibraciones de Gann capaces de forzar un suelo y el no muy lejano suelo teórico (ST) pronosticado por la onda sinusoidal. Con todo, en estas circunstancias cumple armarse de paciencia y esperar a que se desencadene alguna señal. Precisamente para activar una señal de la posible conclusión de la fase descendente del ciclo, el precio sigue estando obligado a romper al alza la línea horizontal situada en 8.639,74.

Permanezcan atentos.