Las cuentas del segundo trimestre han estado condicionadas por un importante aumento de las ventas en el mercado doméstico, en el segmento farmacéutico en particular. Además, el efecto de los tipos de cambio se ha moderado, pasando a tener un impacto negativo de tan sólo el 0,3%, frente a al 1,8% en el primer trimestre del año.
Los ingresos totales se han incrementado un 9,1% respecto al mismo trimestre del año 2013, hasta los 19.500 Mn$. Este aumento ha sido posible principalmente gracias a la buena evolución del segmento farmacéutico, especialmente en su mercado doméstico (+37%).
El coste de las ventas crece más que las ventas en sí, por lo que el margen bruto se reduce de 69,3% hace un año a 69% al cierre del segundo trimestre.
El beneficio neto aumenta un 13% hasta los 4.326 MnUS$, mientras que su BpA ajustado (que excluye gastos de aproximadamente 400 Mn$ derivados de la adquisición de la suiza Synthes Inc. en junio de 2012) se eleva un 12% hasta 1,66 $.
La compañía ha elevado ligeramente su previsión de BpA ajustado de cara al ejercicio 2014, que pasa a estar en el rango 5,85 - 5,92 $ (vs 5,85 – 5,90 $ anterior).
Destaca el hecho de que su segmento farmacéutico haya pasado a ser el principal de la compañía (ya supone un 44% del total de ingresos) en detrimento del de dispositivos médicos, después de que el primero haya crecido un 21% este año y el segundo sólo un 1%, debido a una mayor competencia. Las ventas en su división de consumo y cuidado de la salud apenas consiguen avanzar un 2%.
En términos geográficos, los ingresos en Estados Unidos se incrementan un 15% frente al 4% en el resto de países.
Comentario bursátil:
Ha superado las expectativas del mercado con el dato de BpA ajustado (1,66$ vs 1,55$ estimados) así como en términos de ingresos (19.495 Mn$ vs 18.861 Mn$).
La compañía continúa batiendo las expectativas de beneficios de los analistas del consenso. Con la sorpresa positiva de hoy, ya van 13 trimestres consecutivos que lo consigue. Sin embargo, esta sorpresa positiva no ha sido especialmente relevante, ya que tan sólo en 5 de las últimas 8 ocasiones ha acabado superando al S&P500 en el día que presentaba.
La compañía goza de un negocio muy diversificado y centrado en sectores defensivos. Su división de productos para el cuidado personal supone un 19% de la facturación, un 37% fabricación de dispositivos médicos y un 44% su división farmacéutica, bastante más rentable que la anterior aunque más sensible a las autorizaciones de los reguladores sanitarios de cada país.
El segmento farmacéutico es el que mayor crecimiento está presentando, dentro del cual subrayamos el medicamento para la hepatitis C Olysio, aprobado en noviembre y que ha generado unas ventas de 831 Mn$ en el periodo, más del doble que en el primer trimestre (354 Mn$).
Esta división ha visto cómo desde comienzos de 2000 han expirado patentes de fármacos que sumaban 8.000 Mn$ de ingresos anuales. Desde 2009, J&J ha comercializado medicinas que le han permitido ser la farmacéutica que más crece de entre las 10 mayores del mundo.
La subida del 13% que acumula desde que comenzó 2014 le hace cotizar a un PER actual de 17,8 veces beneficio neto, similar al de otros competidores y algo por debajo de la media de PER al que ha cotizado el valor desde el año 2000, de en torno a 18,7. Los analistas del consenso le otorgan un precio objetivo de 108,65 $, bastante limitado dados los precios actuales. Fiel a su compromiso de remuneración al accionista, en la última década ha elevado la cantidad que reparte en forma de dividendo a un ritmo del 10% anual. A día de hoy, su rentabilidad por este concepto es del 2,7%, que a buen seguro podrá mantener gracias a su fuerte generación de caja.