Entendemos por asset allocation (localización de activos en español) la estrategia por la que un inversor decide cómo distribuir sus inversiones entre las diferentes clases de activos que existen. Es decir, se trata del proceso por el que se decide qué cantidad de dinero se destina a renta fija, renta variable, activos inmobiliarios, sectores industriales, países… El objetivo es equilibrar de la mejor manera posible el riesgo y el retorno de una cartera.
Esta distribución en la inversión suele depender de dos factores principales. Por un lado, el perfil del inversor y, por otro, la situación económica del momento.
Principales activos de inversión
Existen muchos activos a los que dirigir la inversión, aunque la mayoría de los inversores se limitan solo a unos pocos. Los más usados suelen ser: renta variable, renta fija, divisas, materias primas o sector inmobiliario.
Proceso del asset allocation
Consta de tres fases: