¿Qué mayor riesgo para el crecimiento potencial que el factor demográfico? Vaya, mejor no me contesten. Es mejor no dar ideas. Nos quedamos sólo con la sensación de que la demografía se ha convertido en un factor de debate sobre los problemas estructurales de la mayoría de las economías desarrolladas. Y de un creciente número de países emergentes.
Pero, como foco de debate que es, hay posiciones para todos los gustos. Aunque es evidente que la mayoría con sesgo negativo.
Sin embargo, también algunos economistas defienden un impacto menos negativo a medio plazo sobre la demanda derivado del factor demográfico. En concreto, sobre el consumo privado. Aquí voy a sintetizar una nota de nuestros economistas USA. Espero que les anime.
Hay algunos factores de entrada difíciles de rebatir. El más simple es la anticipación de un envejecimiento de la población. Según nuestros datos, en 2030 la población de más de 65 años habrá aumentado en 30 M. de personas y la población de entre 35-64 años sólo habrá crecido en 5 M. Otra idea aparentemente sin discusión es que la población mayor tiende a gastar menos que los jóvenes. Pero, hay un tercer factor que debemos considerar en este punto. Me refiero a la acumulación de riqueza sin precedentes que tendrá la población que se jubile en los próximos veinte años, lo que puede sin duda elevar su renta per cápita y compensar en cierta forma (más de la mitad) el potencial impacto negativo de los dos puntos anteriores.
Naturalmente, no todos los segmentos del consumo pueden verse favorecidos por la mayor riqueza relativa de los futuros nuevos jubilados. Mis economistas consideran que los sectores más beneficiados serán la vivienda, automóvil, entretenimiento, cuidado personal y consumo de alto nivel.
Pero este fenómeno no es nuevo. Del aumento de 8.5 tr. $ en el gasto personal entre 1984 y 2012, 2.7 tr. vino explicado por factores demográficos y 5.7 tr. por aumentos en la renta per cápita: ingresos, crédito, riqueza financiera.
De acuerdo con los datos de la ONU, en los próximos quince años el peso de la demografía sobre la evolución del gasto personal irá claramente a la baja.....
Al final, la generación del baby boom que tanto ha aportado al crecimiento mundial en los últimos veinte años también puede matizar el esperado deterioro del consumo privado en las próximas dos décadas. Espero que todo esto se tenga en cuenta a la hora de “cuidarnos”.