A corto plazo el Ibex 35 está frenado por la banda de los 10.475-10.550 puntos. Si se supera, se vuelve a máximos. A medio plazo no se debe olvidar que el último y el primer trimestre del año son, estadísticamente, los más alcistas.
Semana marcada por los stress test del BCE en Europa, por la reunión de la Fed en USA y por los resultados empresariales en ambas zonas. No ha habido sorpresas ni en los stress test ni en la reunión, en la que la Fed ha puesto fin a seis años de estímulos (QE) aunque sigue diciendo que mantendrá tipos de interés en el 0% “un tiempo considerable”. En cuanto a los resultados, en USA donde van más adelantados, con más de la mitad de empresas del Standard & Poor’s 500 con los resultados publicados, el 73% ha batido expectativas, y solo el 17% ha quedado por debajo. La semana que viene, seguirá la presentación de resultados en ambas zonas, y en USA el martes 4 de noviembre habrá elecciones al Congreso. En los mercados están pasando desapercibidas, a pesar de que puede haber cambios importantes, ya que es muy improbable que los demócratas recuperen la Cámara de Representantes, en manos republicanas, y está en riesgo la mayoría que ahora tienen en el Senado. Esta situación aislaría la Presidencia del Congreso y prácticamente bloquearía al Gobierno. Parece raro, pero suele ser bueno para Wall Street.
El Ibex 35 sigue frenado por la zona de resistencia de los 10.475-10.550 puntos, donde se encuentra los máximos intradía del lunes, las medias móviles de las últimas 70 y 200 sesiones y la directriz bajista. Es una zona difícil, pero si se supera, se volvería a máximos, por encima de los 11.000 puntos.