A corto plazo es posible un recorte para reducir la sobrecompra acumulada, pero a medio y largo plazo la tendencia alcista está asegurada por un QE de 60.000 millones al mes hasta septiembre del año que viene. Ahora los recortes son para comprar.
La reunión del BCE del jueves era la clave de esta semana y se ha cerrado superando todas las expectativas de los mercados: las Bolsas han subido, el euro se ha hundido y la prima de riesgo ha caído por debajo de los 95 puntos básicos. En su comunicado final el BCE ha mantenido sus tipos de interés en mínimos históricos del 0,05% y Mario Draghi ha anunciado que se gastarán un billón de euros en un QE de 60.000 millones al mes, que se iniciará en marzo y durará hasta septiembre de 2016 o hasta que la inflación se acerque al objetivo del 2%. En USA, desde el anuncio del primer QE de la Fed, con compras de 85.000 millones de dólares mensuales, hasta el tapering final, Wall Street subió más del 100%. Pero la reunión del BCE era el primer hito de la semana, el segundo llegará el domingo con las elecciones generales en Grecia. Otra prueba para las Bolsas de la Eurozona. Con seguridad el nuevo Gobierno se sentara a negociar con la troika y lo más probable es que al final haya acuerdo. Pero eso sí, también es probabe que cualquier acuerdo llega tras un tenso y largo periodo de negociaciones, lo que pondrá nerviosos a los mercados. Será una buena ocasión para ir comprando.
El Ibex 35 sube a máximos anuales y su primer objetivo es la directriz bajista iniciada en junio. Ahora los recortes son para comprar.