La zona del euro es "insostenible" en su forma actual y no puede sobrevivir a menos que los países estén dispuestos a ceder soberanía y convertirse en un "Estados Unidos de Europa". Y esto no lo dice cualquiera, sino el gerente del mayor fondo de bonos del mundo. La Sociedad Gestora de Inversiones del Pacífico (PIMCO), ha dicho que mientras que era probable que el bloque de la zona euro permanezca unido en el medio plazo, con Grecia manteniéndose en la zona euro, la moneda única no podría sobrevivir si los países no se unen mucho más.
La persistencia de un débil crecimiento en la zona euro ha provocado un gran malestar entre los votantes y un auge de los partidos populistas como Podemos en España, Syriza en Grecia, y el Frente Nacional en Francia, dijeron los directores gerentes de PIMCO Andrew Bosomworth y Mike Amey.
"La lección que nos deja la historia es que el status quo que tenemos ahora no es una estructura sostenible", dijo Bosomworth. "No hay precedentes históricos de que este tipo de estructura, que es una política monetaria centralizada, una política fiscal descentralizada, pueda durar más de varios decenios".
PIMCO dijo que el auge de los partidos populistas demuestra la pérdida de fe que han sufrido algunas personas sobre el euro.
"La persistencia de un bajo crecimiento se manifiesta en la falta de apoyo en la moneda común, por lo que también conduce a la subida al poder de partidos políticos que quieren acabar con ella", dijo Bosomworth.
"Eso es lo que hemos visto en los últimos años. Los partidos populistas han aumentado desde cero a ser una fuerza considerable. En el caso de Grecia incluso han formado gobierno."
"Esto significa que estamos en una situación crítica, porque no podemos obviar las preocupaciones de estas personas, es necesario que haya una respuesta política, así que esto implica abordar la siguiente pregunta: ¿cuál es el futuro final de la unión monetaria"
PIMCO utilizó el ejemplo de las uniones en Latinoamérica y Escandinavia en el siglo 19, que duraron una media de 50 años antes de romperse, para ilustrar cómo las uniones monetarias eran incompatibles con la soberanía, comenta Szu Ping Chan de The Telegraph.
"Hay que llegar a algún tipo de acuerdo político acerca de cómo compartir los recursos fiscales alrededor de la zona. Queda un largo camino por recorrer, empezando por el diseño y cómo conseguir el respaldo político", dijo.
"Así que mientras que esperamos esto y tenemos un bajo crecimiento y alto desempleo, se corre el riesgo de dejar que estos partidos anti-euro sigan subiendo."
"¿Vamos a lograr unos Estados Unidos de Europa? No es algo imposible, pero podrían pasar muchas décadas en una forma híbrida de federación política y fiscal. Aunque puede que no alcancemos un único gobierno, pasaporte y ejército, podríamos acercarnos bastante".
Mario Monti, ex primer ministro de Italia, dijo la semana pasada que Francia era un "gran problema" de Europa, porque el sentimiento anti-UE amenaza con destruir el eje franco-alemán del bloque.
El mercado laboral inflexible de Francia significa hace que esté "a la zaga" de otros países como España e Irlanda, que han llevado a cabo reformas estructurales.
Bosomworth, que es el jefe de gestión de carteras en Alemania, cree que la zona euro se juega mucho tensando las relaciones con Grecia. "La salida de Grecia del euro es como la guerra nuclear. En realidad, las consecuencias son tan desastrosas que no puede ocurrir", dijo.
Sin embargo, Bosomworth dijo que Berlín se ha vuelto cada vez más impaciente con Atenas.
"El ambiente en Alemania es que la gente está harta de las negociaciones en curso y la forma en que el nuevo gobierno griego las afronta. Esto ha reducido la solidaridad vista en el 2010."
Amey dijo que el programa de compras de bonos del Banco Central Europeo, por importe de 60 mil millones de euros al mes, podría empujar el euro a la paridad frente al dólar, posiblemente a finales de este año.
PIMCO espera que la Reserva Federal de Estados Unidos comience a subir las tasas de interés en septiembre.
"Estamos bastante cómodos con un euro que cotice en la paridad con el dólar y, potencialmente, se encaminará a ella debido a los puntos relativos del ciclo económico y la orientación de la política monetaria en ambas regiones", dijo.
También espera que la QE de la zona euro mantenga muy bajos los rendimientos de los bonos de la eurozona, provocando que el exceso de reservas se dirija a inversiones de mayor riesgo.
Hay tres implicaciones importantes que surgen cuando los inversores reasignan su cartera por la rentabilidad negativa de los bonos: 1) irán hacia activos de mayor duración que todavía ofrecen un rendimiento positivo - aplanando la curva de rendimiento, 2) Se moverán hacia activos de mayor riesgo, como los inmobiliarios y las acciones, 3) saldrán de la moneda, lo que debilitará el euro."
Fuentes: Szu Ping Chan - The Telegraph