Cuando el precio del petróleo entró en barrena en el segundo semestre de 2014, nadie tenía ni idea el nivel en el que podría estabilizarse. Después de todo, a mediados de 2008 una caída libre parecida llevó al precio del crudo desde los 150 dólares a los 30 dólares. Cuando el precio perdió los 50 dólares este año, muchos analistas comenzaron a sugerir que el petróleo podría caer mucho más.
Edward Morse, jefe global de Citigroup de análisis de materias primas, sugirió que los precios del petróleo podrían caer a los 20 dólares. Gary Cohn, de Goldman Sachs, dijo que podría descender a 30 dólares el barril. El analista estrella Dennis Gartman sugirió en la CNBC que podríamos ver una caída a 15 dólares el barril, debido al insuficiente almacenamiento de crudo.
Pero un descenso por debajo de 30 dólares el barril es extremadamente improbable, señala Robert Rapier en The Wall Street Journal. "Mi predicción para 2015 es que el West Texas Intermediate no cerrará por debajo de los 40 dólares el barril, debido a algunas diferencias importantes entre el mercado actual y el de 2008.
A pesar del repetido mantra de la caída de la demanda, la demanda mundial de petróleo creció en más de 5 millones de barriles diarios entre 2008 y 2014. La demanda de petróleo descendió en los países desarrollados durante ese tiempo, pero esta disminución fue más que compensada por el aumento de la demanda en todas las regiones en desarrollo. La Agencia Internacional de la Energía prevé que la demanda crecerá en otros 900.000 barriles por día en 2015.
La creciente demanda de petróleo vino impulsada principalmente a través del crecimiento de la producción de esquisto en América del Norte. De hecho, en 2013 la producción de petróleo de Estados Unidos creció en 1,1 millones de barriles al día respecto al año anterior - desde 8,9 millones de barriles por día en 2012 a 10,0 millones de barriles por día en 2013. La producción diaria fuera de EE.UU. descendió en el periodo 2012-2013 en 554.000 barriles diarios.
El problema es que la mayor parte de la producción de petróleo de esquisto que se suma tiene un punto de equilibrio de costes por encima de 50 dólares el barril. Este es un número en el que coinciden muchos analistas del sector de energía, y también atestiguada por la drástica caída en los presupuestos de inversión en plataformas de perforación y perforadores de esquisto en Estados Unidos cuando los precios del petróleo bajaron por debajo de 50 dólares el barril.
La Administración de Información de Energía prevé que la producción de petróleo de Estados Unidos descenderá ligeramente durante el próximo mes, pero la producción ha comenzado a caer en los campos de Eagle Ford, Bakken y Colorado Niobrara. Las nuevas previsiones señalan que el crecimiento de la producción en los EE.UU. en 2015 estará muy por debajo del millón de barriles por día de los últimos años (y estos pronósticos vienen con la expectativa de que los precios del WTI estarán por encima de 50 dólares el barril).
Así que ¿por qué algunos analistas prevén unos precios tan bajos para el petróleo? Principalmente porque los inventarios de crudo están subiendo a niveles récord. Si bien es cierto que los inventarios de crudo han aumentado rápidamente desde el otoño pasado, esta es la temporada más baja de demanda del año. Los trabajos de mantenimiento de las refinerías de Estados Unidos alcanzarán su máximo este mes. Después, la demanda de crudo comenzará a repuntar.
Las preocupaciones actuales por la deficiente capacidad de almacenamiento de petróleo es en mi opinión la razón por la que el crudo cotiza en los 40 dólares, y por lo tanto es poco probable que sea el catalizador que lleve al crudo a 20 dólares el barril. Mientras que los mercados a menudo corrigen en exceso, el crudo ha mostrado cierta resistencia a caer por debajo de los 40 dólares por barril. Si el precio cae brevemente por debajo de ese nivel, es difícil imaginar un escenario que mantenga el precio por debajo de 40 dólares el barril durante mucho tiempo."
Fuentes: Robert Rapier - The Wall Street Journal