El Banco Santander venía repartiendo un dividendo de 0,15 euros por acción cada trimestre (esto era así desde el 2009), lo que suponía 0,60 euros por acción en el año. Pero esto se va a terminar, el próximo mes de mayo se entregará el último dividendo de 0,15 euros/acción y el siguiente ya será un 66% menor, pasando a ser 0,05 euros/acción cada trimestre (0,20 euros/acción cada año).
Evidentemente, todo lo que sea recibir menos dinero es negativo, no vamos ahora a andar con eufemismos, pero como todo en la vida, hay que mirar el vaso medio lleno, aunque para la gran mayoría no compense respecto a lo negativo: con esta rebaja, el Banco Santander repartirá uno de los cuatro dividendos del año mediante la fórmula del scrip dividend y los tres restantes en metálico. Además, seguramente esta rebaja tenga un marcado carácter temporal, ya que en unos añitos podríamos ver de nuevo cómo se incrementa el dividendo.
Para poder recibir el último dividendo del Banco Santander antes de su reducción, el requisito es sencillo, tener acciones del Santander antes del 14 de abril. Con este dividendo, el accionista podrá optar entre recibir el pago en acciones, vender en el mercado los derechos, o solicitar el pago en efectivo.
El accionista que quiera recibir el pago en efectivo deberá de indicarlo a la entidad y el último día es el 23 de abril, procediendo a recibir el dinero el 4 de mayo.
La entidad, que en el 2014 logró un beneficio superior en un 39% al del año anterior, sigue consolidándose como uno de los referentes a nivel mundial. Es el segundo banco europeo por valor en Bolsa (únicamente le supera el HSBC) y a nivel mundial ocupa el puesto once. En la Bolsa española, es el primer valor por capitalización bursátil, seguido de Inditex y de Telefónica.
La diversificación geográfica es una de sus principales bazas, no en vano el 44% del beneficio proviene de Latinoamérica. Si nos centramos en países, Reino Unido y Brasil aportan el 19%, España el 14% y Estados Unidos el 10%.