Esta semana contaremos con numerosos datos macroeconómicos relevantes. En Estados Unidos, tendremos la primera referencia del PIB 3T15, donde se estima una desaceleración en el ritmo de crecimiento, y sus respectivos componentes (consumo privado, deflactor del consumo privado, índice de precios). Del mes de octubre serán los PMI preliminares compuesto y servicios, el índice de confianza consumidora y el índice manufacturero de Chicago.
Otros datos también importantes que se publicarán del mes de septiembre serán los pedidos de bienes duraderos (general y sin transporte), el deflactor del consumo privado (general y subyacente) y los ingresos y gastos personales.
En Europa habrá que estar atentos a la encuesta IFO de octubre en Alemania y datos de confianza del mismo mes en la Eurozona. Tampoco debemos perder de vista las primeras referencias de precios de octubre, con el IPC preliminar en la Eurozona, Alemania y España donde además conoceremos el PIB 3T15 preliminar. Asimismo se publicarán las ventas al por menor tanto en España como en Alemania, ambas de septiembre.
La atención de esta semana estará en la reunión de dos días de la FED. La institución deberá comenzar la normalización de su política monetaria tarde o temprano apoyado por la buena evolución de su economía, si bien es cierto que las últimas palabras de Draghi (más “dovish” de lo esperado), con el consiguiente efecto depreciatorio en Euro y apreciatorio en Dólar complica la respuesta de la FED en el corto plazo. En cualquier caso, la probabilidad de subida de tipos de interés en la reunión de la próxima semana (28-octubre) es tan sólo de un 6%, del 34% el 16 de diciembre, y teniendo que ir hasta la reunión de abril de 2016 para ver un porcentaje cercano al 60% y a la de junio para que supere el 70%. En cualquier caso, consideramos que la visión de la FED sobre la economía doméstica americana y sobre el entorno internacional será clave para saber en qué momento se puede iniciar la subida de tipos, una subida que es sólo cuestión de tiempo porque los niveles de crecimiento y empleo justifican el inicio de normalización de la política monetaria americana.
Otra cita importante la tendremos en China, donde se celebrará la 5ª sesión plenaria del Comité Central, en la que se presentará el plan quinquenal (2016-20), con el foco en la desaceleración económica que está viviendo el país en transición hacia un nuevo modelo de crecimiento económico (más basado en el consumo y menos en la inversión). Aunque no se espera que se anuncien grandes programas de estímulo, sí que es previsible que las autoridades chinas sugieran medidas para impulsar el crecimiento económico. Estaremos atentos a las previsiones de PIB y a posibles avances en reformas (sector financiero, empresas públicas).
En nuestra opinión, la ralentización de la economía China y expectativas de un aumento de los tipos de interés en Estados Unidos seguirán contribuyendo a que se mantenga la volatilidad en el mercado. A pesar de ello, consideramos que los índices deberían seguir recuperando parte del terreno perdido en un contexto donde las expectativas cíclicas nos parecen demasiado negativas (capacidad de Estados Unidos y Europa para mantener buenos ritmos de crecimiento, idea que los datos macroeconómicos siguen apoyando) y un BCE dispuesto a hacer lo que sea necesario (tras dejar la puerta abierta a una ampliación de los estímulos tan pronto como en diciembre). En nuestra opinión, los niveles actuales son atractivos de cara al medio/largo plazo. Vemos que muchos valores y sectores han sufrido caídas muy acusadas, habiéndose alejado de sus precios objetivo incluso en entornos macro menos atractivos. Más a corto plazo, y con la vista puesta en la reunión de la FED y la 5ª sesión plenaria del Comité Central en China, la semana que viene el movimiento de los mercados también vendrá marcado por las referencias macroeconómicas (ver análisis macro) y la temporada de resultados.