EE.UU.
Cuando la Fed suba los tipos, probablemente será bajo la condición previa de que la mayor parte de las preocupaciones recientes en relación con el crédito, China, la constitución de inventarios y la prolongada volatilidad de los mercados hayan disminuido. Por lo tanto, con toda probabilidad, el S&P 500 debería subir muy por encima de los niveles actuales antes de que se eleven los tipos. Muchos de los participantes del mercado están preocupados por las revisiones de beneficios, pero, en términos históricos, se requiere una disminución del 5% o más de los beneficios para que se dé un mercado bajista. No creemos que esto vaya a ocurrir a menos que el PIB de EE.UU. se sitúe por debajo del 1,2%, la carga de intereses aumente 100 puntos básicos o el crecimiento de los salarios supere el 3%.
Eurozona
Las encuestas realizadas en Europa están en línea con el resto del mundo (especialmente por el lado de la producción), pero los datos de consumo siguen siendo optimistas. La probabilidad de una QE 2.0 por parte del BCE sigue aumentando, impulsada por el deterioro de los datos «blandos» (encuestas) y las expectativas de la inflación, junto con las moderadas declaraciones de Nowotny. El 50% del mercado espera que diciembre sea el momento en que podrían anunciarse tales medidas (más QE).
Asia emergente
Los analistas esperan que el crecimiento regional aumente en los próximos trimestres y mantenga un ritmo aceptable como consecuencia de: (1) la agresiva política de flexibilización en China; (2) el crecimiento estable en EE.UU. que debería contribuir a elevar los resultados de las exportaciones en la región; (3) un contexto de bajos tipos de interés en la mayoría de los países (políticas monetarias nacionales acomodaticias) debido a los escasos indicios en el sentido de que estas economías están funcionando al límite de su capacidad y a la falta de presiones inflacionarias; y (4) el hecho de que son los mejor situados para beneficiarse de un mercado energético estructuralmente bajista. Teniendo esto en cuenta, los analistas esperan que los mercados de renta variable se fortalezcan en los próximos 2 años.
China
El programa de “re-crédito” del banco central de China (PBoC) no es un programa al estilo de las QE. Los bancos están autorizados a utilizar sus préstamos como garantía para pedir prestados fondos al PBoC a tipos de interés preferentes siempre que se utilicen para conceder préstamos a las pequeñas empresas o al sector agrícola. Según los analistas locales, los temores de crisis son exagerados. Los datos recientes sugieren una estabilización (creciendo el sector industrial un 6% interanual) y apuntan a cierta aceleración (creciendo el sector servicios al 8,75%, y acelerándose las ventas minoristas reales hasta el 10,8% interanual). La actual transición desde una industria intensiva en capital hacia unos servicios intensivos en trabajo está ayudando a mantener el mercado laboral relativamente rígido y el consumo privado relativamente saludable.
India
Los datos oficiales indican que la India creció a un impresionante 7,0% en términos interanuales en el segundo trimestre, convirtiéndose en una de las economías de más rápido crecimiento en el mundo. Los desequilibrios externos se han desvanecido y el déficit por cuenta corriente se ha reducido desde 100.000 millones de USD hasta 20.000 millones de USD. Esto debería ayudar a mantener estable la rupia y, de este modo, permitir a las autoridades de la India relajar la política para apoyar un rebote cíclico.
Japón
El Gobierno rebajó oficialmente sus perspectivas económicas en su informe mensual de octubre. Los responsables de la política no se muestran proclives a ampliar el estímulo pese a la contención de la inflación. Según las fuentes, existiría mayor preocupación por los efectos secundarios de la política de expansión cuantitativa y cualitativa (QQE) instrumentada; en particular, por la menor liquidez del mercado de deuda pública.
Brasil
Los datos siguen decepcionando y están aún lejos de darse la vuelta. Continúa la paralización del Congreso y se descarta la aplicación de las medidas de Levy para solucionar los problemas a corto plazo (fiscal). Como consecuencia de ello, Fitch rebajó la calificación crediticia de la deuda soberana de Brasil a BBB-, con perspectiva negativa. La única (si lo es) noticia positiva es que a medida que los efectos básicos de la eliminación de los subsidios se disipe, la inflación empezará a caer bruscamente a partir de diciembre (se esperan 8 descensos consecutivos de la inflación a partir de enero, hasta alcanzar el nivel del 6,1%). Esto podría proporcionar algún alivio al Banco Central de Brasil (BCB), abriendo la posibilidad de un cierto relajamiento en los tipos.
México
Los factores internos (datos de consumo) siguen siendo sólidos. El sector externo también parece haber mejorado. La Asociación Mexicana de la Industria Automovilística (AMIA) informó de que durante los primeros nueve meses del año las exportaciones de automóviles alcanzaron un nuevo máximo histórico.