No, no es China. Aunque es cierto que en China, al igual que en otras economías en desarrollo, la inflación elevada supone un quebradero de cabeza para las autoridades. Pero, en Europa un ejemplo de un país donde la inflación sistemáticamente ha estado por encima de su nivel objetivo en los últimos años ha sido UK.
Si no recuerdo mal mañana miércoles el BOE publicará su Informe Mensual de inflación. Para muchos analistas es clave para valorar el margen de maniobra que mantiene la autoridad monetaria británica, con su Gobernador rebajando las presiones para un cambio de sesgo que anticipe la retirada de estímulos. De hecho, quizás hoy mismo tengamos un anticipo del Informe con la publicación del dato de inflación del mes de octubre. Y esperemos que la cifra anual modere su tasa hasta niveles de 2.3 % desde el 2.7 %. Las razones son las mismas que han presionado a la inflación en la zona EUR: efecto escalón de los precios externos, en este caso agravado por la debilidad de la moneda. La diferencia con respecto al área es que la inflación podría estabilizarse en los próximos meses en niveles ligeramente por encima del nivel objetivo de medio plazo del 2.0 %.
Esto es lo que se puede observar en el gráfico anterior. Pero, si lo ven más en detalle, observarán que algo ha cambiado en la relación producto/inflación de forma reciente: por primera vez desde el inicio de la Crisis, el crecimiento del PIB real superará al nivel de inflación. Y esta tendencia es lo que probablemente nos confirmará el BOE en su reunión de final de año, revisando al alza las previsiones del verano para un crecimiento del 2.7 %/2.5 % respectivamente en 2014/2015 (nosotros esperamos tasas del 3.0/3.2 % respectivamente).
¿Qué opciones tiene el BOE en este escenario? Niveles de desempleo del 7 % podrían alcanzarse ya en la parte final del próximo año, lo que no significa que esperemos que suban tipos ya en 2014. Pero sí consideramos factible que el BOE comience a valorarlo en 2015. Aunque, como no se cansan de repetirlo en la Fed, los datos económicos mandan. Y un ritmo de crecimiento como el descrito al mismo tiempo que un nivel de inflación por encima del 2.0 %, con el desempleo bajando claramente del 7 %, podría forzar una respuesta más brusca desde la política monetaria. No es el escenario más probable, pero en estos momentos no estamos para descartar ninguna posibilidad.