Extracto de mi libro (aún en proceso) Instituciones de Análisis Técnico. Veremos en este artículo las líneas de Gann y las especificidades de los patrones tendenciales.
Las líneas de Gann
Son líneas de tendencia trazadas a partir de máximos o mínimos relevantes con ángulos geométricos concretos y específicos.
La línea digamos clave y más importante se traza con un ángulo de 45 grados desde un techo o suelo.
Si hablamos de una tendencia alcista, se podrían dibujar líneas de Gann más inclinadas, con un mayor grado en su ángulo (entre 60º y 75º).
En el polo opuesto tendríamos líneas de Gann más planas, con ángulos entre 15º y 25º.
En el siguiente gráfico tienen un ejemplo de las líneas de Gann.
En realidad, se pueden trazar hasta nueve líneas diferentes de Gann. La mecánica viene a ser similar a la de las líneas de velocidad. Por ejemplo, en una tendencia alcista, si el precio comienza a corregir y pierde una línea, podría bajar en busca de la siguiente línea.
Las líneas de Gann siempre han mantenido dividida a la doctrina. Mi opinión es que como puntos de entrada me parece muy presuntuoso, ya que son hasta nueve líneas y no se puede saber realmente en cuál de ellas se producirá un rebote al alza, y esto cuando hay una cierta distancia entre cada una de las nueve líneas supone un gran problema.
En todo caso, podrían utilizarse como referencia de cara a posibles objetivos o cierre parciales de una operación.
Concepto
Hasta ahora hemos estudiado qué es una tendencia, cuántas clases existen, la importancia que tiene, cómo se identifica y cómo ha de ser aprovechada. Pero una tendencia dura x tiempo y a lo largo de este periodo pueden surgir muchas vicisitudes, como los patrones de tendencia.
Las figuras o patrones de cambio de tendencia y las de continuidad de la tendencia son unas pautas gráficas que alertan al analista técnico de la posibilidad de que se puede producir en breve un giro o cambio de tendencia en la evolución del precio del mercado, de alcista a bajista o bien de bajista a alcista, o por el contrario que la dirección del precio se mantiene y continuará su camino.
Como se puede deducir, este tipo de patrones aparecen en la recta final de una tendencia, tanto si es alcista como si es bajista.
Por regla general, el proceso de cambio de tendencia no es algo que surja de la nada y que se desarrolle rápidamente, sino que suele ser un proceso que lleva su tiempo de maduración, y es precisamente durante esta fase cuando se van formando y consolidando los patrones de cambio de tendencia.
Las clases de patrones de tendencia
Existen dos clases o tipos de patrones de tendencia, ambos muy bien diferenciados y con efectos y consecuencias totalmente opuestos, de manera que cobra especial relevancia proceder correctamente a su identificación en aras de poder realizar un correcto análisis técnico.
– Patrones de cambio de la tendencia: alertan al analista de que la tendencia vigente en ese momento podría estar llegando a su fin y que pasaría de alcista a bajista o bien de bajista a alcista.
– Patrones de continuidad de la tendencia: indican que la tendencia vigente sigue su curso, que el mercado simplemente se encuentra en un descanso o pausa, que se está tomando un respiro aprovechando en muchas ocasiones que existen elevados niveles de sobrecompra o de sobreventa, de ahí que aparezca un proceso correctivo de corta duración, tras el cual el precio volverá a reanudar la tendencia vigente y actual.
El estudio del volumen suele ser tenido en consideración por la mayor parte de la doctrina de cara a confirmar si la formación de un patrón de tendencia es fiable o no.
Consideraciones sobre los patrones de tendencia
A nadie se le escapa que para poder hablar de la formación de un patrón de cambio de tendencia o de continuidad de la misma, es requisito ineludible que exista una tendencia principal o primaria previa.
Cuando un patrón de cambio de tendencia culmina su formación, aunque haya cumplido los requisitos intrínsecos, hay que ser precavidos y si utilizamos un filtro de seguridad mejor, siendo los más fiables los siguientes:
– La rotura de una línea de tendencia o directriz.
– Como complemento del primero, la rotura de un canal tendencial.
– La rotura de un nivel de soporte o de resistencia.
En todos estos casos, es importante recordar lo explicado acerca de la aparición de un pullback o de un throwback.
La dimensión del patrón de tendencia ha de ser tenida en cuenta por el analista técnico, es decir, la altura y el ancho de la figura tendencial. Algunos autores explicaron muy bien esta cuestión, que se puede sintetizar en que la altura mide la volatilidad del patrón y el ancho determina cuánto tiempo llevará la culminación del referido patrón.
Así pues, cuanto mayor sea la dimensión del patrón de tendencia, mayor relevancia adquirirá y mayor extensión podría tener el siguiente movimiento, es decir, si hablamos de un patrón de cambio de tendencia podríamos tener un fuerte impulso en la dirección contraria; si hablamos de un patrón de continuidad podríamos asistir a un impulso fuerte que reanude la tendencia existente.
La mayor parte de la doctrina está de acuerdo en que los patrones superiores suelen tener una duración menor que los patrones inferiores, al tiempo que también son más volátiles. Por tanto, el movimiento del precio dentro del rango de los patrones superiores suele ser más amplio y de mayor intensidad, y el tiempo para formarse estos patrones suele ser más reducido que en los inferiores.
En lo que respecta al volumen, decir que por regla general, se incrementa en la dirección de la tendencia del mercado y suele adquirir mayor importancia si cabe cuando el patrón se ha culminado, que es cuando debiéramos de ver picos de volumen.